El hallazgo de los restos de cinco mujeres en la segunda campaña de exhumaciones del cementerio municipal de Son Coletes, en Manacor, al tiempo que parecía solventar un problema histórico, bifurcaba el camino en tres posibilidades plausibles de cara a saber la identidad de aquellos cuerpos.

La primera opción que manejaron los expertos por sus estaturas y al tener claro que eran cinco esqueletos femeninos, fue la de suponer que eran las cinco enfermeras milicianas asesinadas en 1936 en Manacor y llegadas en verano como parte de la expedición catalana comandada por el capitán Alberto Bayo para tratar de recuperar la isla para la causa republicana. Pero nadie avisó a las enfermeras, que se encontraban trabajando en un pequeño hospital de campaña cerca de Son Carrió, de que su barco ya había zarpado, con lo que fueron capturadas, torturadas, asesinadas y supuestamente lanzadas a la fosa común de Son Coletes.

Los esqueletos encontrados en la fosa 3 de Son Coletes. CAIB

Todo hace pensar que fueron “trasladadas hasta Son Coletes con vida" y que aquí fueran ajusticiadas

Pero el hecho de que los cuerpos fueran encontrados con vestidos y ropa de calle muy distinta a los monos de trabajo de las enfermeras de la Cruz Roja, hicieron sospechar a los arqueólogos que bien podría tratarse de otras mujeres distintas. De ahí las otras dos opciones: o que fueran ‘anónimas’ o, y lo que tomó más cuerpo, que fueran las conocidas como Rojas del Molinar con Aurora Picornell a la cabeza. Y que por tanto no estuvieran en el cementerio de Porreres como se creía, sino en Manacor.

Con vida

Para el investigador manacorí, Antoni Tugores, todo hace pensar que fueron “trasladadas hasta Son Coletes con vida y que aquí fueran ajusticiadas. No es un procedimiento lógico, pero es que los asesinos no seguían razonamientos normales, como tampoco era normal asesinar mujeres”. Es ahí cuando Tugores recuerda con cierto abatimiento que de las “diecisiete mujeres de las que hay constancia que fueron asesinadas durante la represión fascista, quince han sido encontradas en el cementerio de Manacor”.