Una empresa de Valencia ha conseguido dar con una solución para reutilizar las redes viejas de pesca, que se depositan en la basura. En vez de quemarlas, como un plástico cualquiera, ahora se reutiliza el material y se convierte en un banco urbano o en una nueva papelera.

El ejemplo de lo que supone la posibilidad de poder reciclar un material antiguo, para darle un uso actual, se pudo comprobar ayer en la inauguración de los ocho bancos urbanos que se instalaron en una plaza junto al muelle de pesca de Palma.