El colectivo de cazadores afectados por la ampliación y el cambio de usos del parque natural de Llevant reprochan y acusan al director general Llorenç Mas de «engañarles». En un comunicado, denuncian que tras las reuniones que se mantuvieron para tratar las alegaciones por la modificación del Plan de Ordenación de los Recursos Naturales (PORN) del parque, el director general de Espacios naturales y Biodiversidad de la conselleria de Medio Ambiente y Territorio del Govern se comprometió con ellos «a mantener una serie de medidas y modificar otras, sin que éstas tuvieran ningún perjuicio sobre la flora y la fauna del parque y que son totalmente compatibles con todas las actividades restantes permitidas en el mismo».

Entre los temas tratados con el colectivo, «se habló en profundidad de mantener la caza en los terrenos cinegéticos de aprovechamiento común, popularmente conocidos como terrenos libres, sobre todo con modalidades tradicionales, que dicho sea de paso deben ser objeto de protección por parte de las administraciones», recalcan.

La «sorpresa», afirman, ha venido una vez publicada la aprobación del texto, donde se ha comprobado que Llorenç Mas «no sólo ha faltado a su palabra sino que tampoco ha existido transparencia alguna». Según los cazadores, con la nueva normativa se «han introducido más restricciones que no aparecían en el primer borrador y no pudieron ser debatidas en su momento, como la reducción a 15 colls en la finca pública de Son Real». Los cazadores aseguran no entender cómo «un gobierno que supuestamente pregona defender la igualdad en todos los colectivos, sobre todo ayudando a los económicamente más vulnerables, discrimine mediante el texto aprobado a las personas con menos recursos y que no pueden acceder a un coto de caza y las aboque y prive de realizar una de las actividades más reguladas y tradicionales en los terrenos libres». Una actividad que los cazadores de la zona de Llevant «llevan realizando de manera secular, y sin embargo se permitan otras actividades relativamente más recientes como el footing o el nording walking».

Gráfico en el que se aprecian los nuevos límites del parque natural del Llevant tras la ampliación. Caib

Maquillado

También exponen que los artículos que sí se han modificado solo se han «maquillado de tal manera que dejan las puertas abiertas a más tipos de restricciones y prohibiciones o simplemente se han mejorado unas cosas y se han añadido otras prohibiciones en el mismo artículo».

Por otro lado, los cazadores denuncian la «falta de respeto hacia los pescadores fluviales, a los cuales se les ha despojado de la pesca de la anguila en los torrentes de Son Bauló, es Ravellà y de na Borges».

Una «incongruencia de este plan de ordenación de recursos naturales es que haga especial hincapié en la erradicación de especies invasoras y a la vez prohiba pescar en dichos torrentes una especie invasora como el cangrejo azul». Más siendo la propia administración, recuerdan, quien en el 2020 aprobó una norma en la que se autoriza la pesca de dichos cangrejos en dichos torrentes con el fin de erradicarlos; «por una parte promueven la erradicación y por otra prohiben su pesca delimitando la zona como de exclusión en los torrentes. Una verdadera chapuza y una vergüenza», reza el comunicado.

Para los cazadores, por parte del Govern «queda plasmado el radicalismo, la ideología anti-caza y el afán de perseguir al colectivo cinegético, el más regulado de todos los que practican actividades en el medio natural, con independencia de la modalidad practicada».

A pesar de la queja manifestada, el colectivo confía en que «los dirigentes políticos recapaciten y encuentren una solución positiva para todas las partes».