El servicio de Prevención de Riegos laborales del Personal Docente también se encarga de los accidentes de estos profesionales. La mayoría son accidentes ‘in itinere’, pero durante la jornada también hay caídas, esguinces y, algunas agresiones («un porcentaje mínimo», aseguran desde el servicio) por parte de alumnos o padres. 

El año pasado se noticiaron 106 accidentes de profesores y maestros y en lo que llevamos de año el servicio ha atendido 150 notificaciones, la cifra ha subido ligeramente y aunque no lo parezca es una buena noticia: no es que se hayan producido más accidentes, sino que poco a poco se van notificando más. 

«En general hay una infranotificación», explica el enfermero especializado Pedro Llull, responsable de esta área : «Se producen muchos más, pero la mayoría no se notifican, desde aquí animamos a que nos los comuniquen siempre», solicita, «aunque sea un simple accidente», insiste. 

En el caso de caídas el servicio puede por ejemplo revisar el lugar donde se han producido para ver si el tropiezo se debe a algo que pueda ser cambiado para evitar más, indica Llull.