«La demanda de grandes superficies, principalmente procedente de importantes empresas de ámbito nacional e internacional, no puede cubrirse dada la escasa oferta de oficinas de calidad en edificios exclusivos en el centro de Palma, donde se concentra la mayor parte de esta demanda». Así se pone de relieve en el último informe elaborado por la consultora CBRE, pero el fuerte impulso que está registrando la economía balear, sumado al déficit de algunas infraestructuras, hace que los problemas alcancen a otros sectores,. Se añade que «las empresas dedicadas al alquiler y custodia de vehículos han incrementado la demanda de ubicaciones cercanas al aeropuerto de Son Sant Joan para su almacenamiento.
Los operadores logísticos siguen ubicados en instalaciones que no cumplen con sus requerimientos ante la imposibilidad de encontrar suelo o naves aptas para realizar su actividad a un precio razonable».
Lo primero que se indica en el informe es que «Balears terminó el año 2022 marcado por una espectacular recuperación del mercado inmobiliario, con gran protagonismo del sector turístico», lo que además se ha traducido en una mayor demanda de empresas interesadas en ubicarse en los principales ejes comerciales de Palma y de Ibiza, y en un incremento de la necesidad de espacios industriales para compañías de rent a car, del sector náutico o logísticas. En el caso de oficinas, se subraya además que la oferta de espacios que se ajusten a la demanda existente es muy limitada.
Respecto a estas últimas, se añade que el parque de oficinas de Palma, donde existe la mayor demanda, se reparte entre el centro de la ciudad, «donde quedan superficies obsoletas pendientes de ser renovadas», y en los polígonos industriales, instalaciones estas últimas que en buena parte siguen siendo propiedad de las entidades financieras. Es aquí cuando se advierte de que hay empresas nacionales e internacionales que no logran encontrar un espacio para que sus necesidades en la isla se vean satisfechas, lo que se refleja en que «en 2022 se transaccionaron un 28% menos de oficinas en venta y alquiler que en el año anterior», pese a que en este último la economía de las islas todavía estuvo muy afectada por la pandemia.
Además, se destaca que el 44% de las oficinas alquiladas o vendidas en 2022 contaban con una superficie inferior a los 200 metros cuadrados, y solo un 15% superaron los 500 metros.
Según la directora de la oficina de CBRE en Palma, Tonia Vera, esta escasez está frenando la implantación de firmas gestoras del coworking (espacios compartidos por varias empresas), tecnológicas y aseguradoras, entre otras.
Precios medios
Los alquileres medios de oficinas aumentaron un 5,8% durante 2022 y se movieron entre los 9 y los 11 euros el metro cuadrado en el caso del centro de Palma, aunque en estos momentos ya se sitúa en los 12, y entre los 8 y los 9 en los polígonos. Sin embargo, en la zona de Poniente, y más concretamente en el tramo final del Paseo Marítimo se han llegado a pagar 17 euros por metro cuadrado debido a la escasa oferta de edificios exclusivos existente. En cuanto a la venta, se alcanzan los 2.100 euros por metro cuadrado en las Avenidas, y los 3.500 euros en el centro, para bajar en los polígonos hasta el tramo de los 850 y los 1.200 euros.
También se pone de relieve el aumento de la demanda de espacios industriales, con el problema más evidente en el caso de los rent a car por la escasez de espacios disponibles, con los alquileres más altos en los polígonos de Son Morro y Son Rossinyol, al moverse entre los 6 y los 8 euros el metro cuadrado al mes.
