Esta temporada los turistas han elegido Baleares como destino turístico por la relación calidad-precio de la mayoría de los hoteles, como en 2019. Pero tras los confinamientos de la pandemia, con más necesidad de disfrutar de las playas y alrededores, han percibido los entornos naturales y medioambientales y los lugares de diversión saturados y masificados.
Así pues, como los residentes, los visitantes, y no solo los repetidores, han tenido una percepción grave de masificación en el uso de las infraestructuras y entornos naturales, advierte el Barómetro de septiembre de Quaderns Gadeso, centrado en la opinión de los turistas este verano 2022. Se advierte que será fundamental gestionar los flujos de visitantes. En ese mismo sentido se ha expresado ya la Federación Hotelera de Mallorca tras las quejas de la población isleña por la saturación de esta temporada alta.
La oferta comercial resulta con una valoración "absolutamente negativa" por repetitiva
La valoración sobre el alojamiento hotelero mejora respecto a 2019, sin embargo la del todo incluido empeora, probablemente a causa de la masificación. En cambio, el alquiler turístico mejora en su evaluación.
La oferta comercial sale mal parada, con «una valoración absolutamente negativa» por repetitiva y poco diferenciada, mientras que la oferta lúdica varía por islas. En Mallorca y Formentera se perciben mejor que en Menorca, y la oferta recreativa (deportiva, náutica, senderismo, etc.) se valora ahora más, excepto en Menorca.
La percepción de las infraestructuras es bastante negativa y ha empeorado respecto a 2019, por la masificación de las playas, la saturación de la red viaria y la falta de aparcamientos.
Respecto a los servicios públicos, el transporte se valora como altamente negativo y la asistencia sanitaria se considera satisfactoria.
