La ultraderecha se convirtió ayer en la primera formación en capitalizar en las calles el descontento social por la escalada de precios de la luz y los combustibles en el entorno de la invasión rusa en Ucrania. Medio millar de personas enardecidas entre gritos de «¡Viva España!» se concentraron en la plaza de Cort, en Palma, al mediodía para reclamar bajada de impuestos, defender la soberanía energética y «no depender de países extranjeros». El líder de Vox en Balears, Jorge Campos, reclamó el adelanto de elecciones y la dimisión de la presidenta del Govern, Francina Armengol, y de Pedro Sánchez.
«Hay que echarles» y «elegir una alternativa» porque «nos van a arruinar», bramó el presidente de la formación en el archipiélago.
A la convocatoria de Vox, que se replicó con manifestaciones en el resto de provincias, se sumó el sindicato Solidaridad, vinculado a la formación, en un acto que se cerró con el himno a España y arrancó con proclamas contra el Gobierno de Pedro Sánchez y el de Armengol, reclamando: «¡Que nos devuelvan lo robado, que nos arruinan!». En cuanto a los asistentes, había «gente cabreada», como resumía un autónomo que enumeró que entre las 500 personas congregadas -coincidió el cálculo de la Policía Nacional con el de los convocantes, aunque después estos elevaron la participación a 800 asistentes- figuraban «transportistas, asalariados y padres de familia».
Los manifestantes portaban pancartas en las que demandaban «Soberanía energética, alimentaria e industrial ya» y otras rezaban: «¡Que su factura la paguen ellos!» o «Devolved lo robado» (aludiendo a PSOE, CCOO y UGT). A gritos de «¡presidente, presidente!» compareció en la tarima frente al Ajuntament el presidente de Vox en Balears, Jorge Campos, después de que tomara la palabra David Simón, trabajador de seguridad y delegado de Acción Sindical en Balears de Solidaridad, agrupación que está «empezando» su andadura en el archipiélago y presume de ser un sindicato «no subvencionado».
"Exigimos que se no se destinen miles de millones a adoctrinamiento en las escuelas, en las empresas y los medios de comunicación"
Pacto PP-Vox
Campos exigió un gobierno «que baje impuestos y libere a las clases populares y medias de España de esta presión fiscal asfixiante», y que no se destinen «miles de millones a adoctrinamiento en las escuelas, en las empresas y los medios de comunicación». También reclamó que vele por la seguridad de las fronteras, de las familias, pueblos y barrios» porque «no queremos vivir con miedo por culpa del buenismo» .
El líder de Vox dijo estar dispuesto a que se repita «la fórmula» del gobierno de Castilla y León con el pacto entre su partido y el PP.
