El presidente del Parlament balear, Vicenç Thomàs, reivindicó ayer en su discurso por el Día de les Illes Balears la «reflexión necesaria» para decidir cómo afrontar el presente y el futuro del turismo en las islas, un importante debate que comienza hoy en el pleno del Parlament con el decreto ley de circularidad y sostenibilidad turística.
Para el máximo representante de la Cámara balear, el turismo, un sector que afronta «un momento de transformación», ha de «conjugar las previsiones estatutarias y el impulso europeo» como «actividad económica básica y principal» en Baleares.
Un discurso que empezó, como no podía ser de otra manera, con unas primeras palabras dirigidas a las 1.218 personas que han perdido la vida por la covid en el archipiélago: «Siempre los tendremos presentes en nuestra memoria, y no nos cansaremos de rendirles homenaje, compartiendo el dolor de sus familias y amigos», pronunció Thomàs.
Ante un salón de los pasos perdidos abarrotado de autoridades políticas y representantes de la sociedad civil, el presidente rechazó la «ruptura de las relaciones diplomáticas y la violación del derecho internacional» por parte de Rusia, y manifestó el «apoyo y salidaridad» de los baleares con los ciudadanos de Ucrania, así como con su «gobierno legítimo».
En este sentido, el responsable pidió a la Unión Europea y a Naciones Unidas una «respuesta unitaria y coordinada» para hacer frente a una «agresión militar que genera incertidumbre e inseguridad global, económica, social y política».
«Todos debemos tener claro que solo estando unidos podremos conseguir superar las adversidades», dijo tras recordar que el conflicto bélico no solo «pone en juego la vida de los ucranianos», sino también la «democracia y los valores de pluralidad, diversidad, derechos humanos y civiles».
Por el contrario, celebró la aprobación de unos Fondos Europeos «amplios» destinados a la recuperación sostenible, con un impulso que también «vendrá de la mano de las energías renovables y de la movilidad verde» en la lucha contra el cambio climático.
El discurso de Thomàs centró el acto que conmemoró el XXXIX aniversario del Estatut d’Autonomia, el «marco de convivencia» que «integra la voluntad de la gran mayoría de ciudadanos» de las islas. Gracias al autogobierno, aseguró el dirigente, el archipiélago tiene «un buen sistema educativo y de salud, una red sociosanitaria, una cultura rica y un patrimonio lingüístico» que «define la identidad» de esta comunidad.
Respecto al balance de la actividad parlamentaria de los últimos meses, Thomàs destacó la aprobación de la ley de Educación, la de Salud Pública y el impulso a las ayudas para acceder a la vivienda. También subrayó la aprobación de la reforma del Estatuto y la eliminación de los aforamientos para diputados y miembros del Govern.
Igualmente, para el representante, la actual legislatura echó a andar con «la presencia más plural de grupos parlamentarios de la historia» en Baleares. Una diversidad que, lejos de ser un obstáculo, «ha convertido el diálogo y el pacto en la forma de hacer política a la hora de llevar a cabo soluciones para los ciudadanos».
Con todo, insistió en huir del «pesimismo paralizador» para apostar por el progreso y abogó por que los próximos años sean «los de los grandes acuerdos». Invitó a los presentes a «seguir sumando» para «superar definitivamente la pandemia».
El acto institucional comenzó con la lectura de varios artículos del Estatuto de Autonomía por parte de los estudiantes ganadores del concurso del Parlament, y tras el discurso, concluyó con un pequeño concierto del cuarteto de cuerda de la Joven Orquesta de Baleares.
