La vacunación de la población infantil de Balears contra la covid-19 va rezagada. La consellera de Salud, Patricia Gómez, ha admitido hoy que tan solo el 21% de los menores con edades comprendidas entre los 5 y los 11 años se habría inmunizado, uno de los porcentajes más bajos del país, por lo que emplazó a los medios de comunicación a informar a la población de que "al lado de Ikea" hay un nuevo vacunódromo en el que se puede inmunizar a los menores en horario vespertino de lunes a viernes (de dos de la tarde a nueve de la noche) con el objeto de que no pierdan clases e ininterrumpidamente de 9 de la mañana a 9 de la noche durante los fines de semana. La petición de la consellera obedece a que hay mucha gente que desconoce que el Espai Francesc Quetglas se encuentra a pocos metros del famoso centro comercial sueco.

El nuevo punto de vacunación, inaugurado el pasado viernes, ha sido visitado hoy por la presidenta del Govern, Francina Armengol, que ha aprovechado para resaltar una vez más las ventajas de vacunarse para evitar una covid-19 grave así como ingresos hospitalarios más prolongados. "Vacunarse es, además, otra manera de proteger a los sanitarios que tanto están trabajando por nosotros", ha subrayado.

Por su parte, la consellera de Salud ha justificado la lentitud de la vacunación infantil en que esta comunidad abrió inicialmente el proceso solo para los niños con edades comprendidas entre los 9 y los 11 años y que posteriormente se amplió hasta los cinco años. Otra circunstancia que habría influido son los viajes y desplazamientos de las familias en estas fechas navideñas, ha esgrimido Gómez antes de anunciar que colaborarán más estrechamente con la conselleria de Educación para facilitar a las familias más información sobre las ventajas que implican vacunarse contra la covid.