El 6 de agosto de 1991, Diana de Gales y el príncipe Carlos, con sus hijos, se embarcaron en Nápoles a bordo de un lujosísimo yate para celebrar su décimo aniversario de boda y desmentir los rumores de crisis matrimonial. La prensa rosa lo calificó de segunda luna de miel y ayer por la mañana se recreó esa misma escena en el Club de Mar de Palma con el mítico Cristina O, que perteneció al multimillonario Aristóteles Onassis. Lady Di ha vuelto a la isla, ahora interpretada por la actriz Elizabeth Debicki, que se estrena en la exitosa serie de Netflix The Crown. Se trataba del primer día de rodaje en Ciutat de la quinta temporada y también estaban el actor Dominic West (Carlos de Inglaterra), los niños que interpretaban a Guillermo y Enrique y hasta una treintena de figurantes, que hacían de escoltas, chóferes, paparazzi, carabinieri (policías italianos) y paseantes, incluso con un carrito de bebé, que gritaban y piropeaban a la princesa del pueblo.

La grabación en el pantalán del Club de Mar se centró sobre todo en la llegada de Diana y sus hijos en un Rolls Royce descapotable negro con matrícula de la ciudad italiana. El heredero de la Corona británica les esperaba junto a las escaleras del yate mientras un grupo de fotógrafos les retrataba. En la cubierta del barco saludaron a la tripulación y, ya en el interior, continuó el rodaje de la nueva temporada en la plataforma de streaming, que se emitirá a finales de 2022. Durante los próximos días se realizarán las escenas en alta mar en entornos paradisiacos, como Sant Elm y sa Calobra, y está previsto además recrear el último verano de Lady Di y su pareja en 1997, Dodi Al-Fayed, en la Costa Azul, Costa Esmeralda y Porto Cervo, antes de su fallecimiento en un accidente en París.

La actriz Elizabeth Debicki, caracterizada como Diana de Gales, y Dominic West, como Carlos de Inglaterra, durante el rodaje de 'The Crown' en el Club de Mar de Palma. DM

Los próximos días la grabación se trasladará a Sant Elm y sa Calobra para rodar las escenas en alta mar

La grabación de ayer se inició pasadas las diez horas y duró toda la mañana. Los figurantes llegaron en autocar antes de las 9,30 a la dársena de Can Barberà y desde allí se desplazaron al muelle 3-4 del Club de Mar, cuyo parking transversal se llenó de furgonetas y stands de comida, pruebas PCR y demás necesidades del equipo de producción de la multipremiada serie, Left Bank Pictures, que en Mallorca cuenta con la logística y experiencia de Palma Pictures