Estaba acabando su jornada laboral cuando se presentó su ex y padre de su hijo menor en el trabajo para pedirle el favor de que le llevara en coche de Zaragoza a Villanueva de Gállego. Pese a las amenazas reiteradas que sufre y algún que otro episodio de malos tratos, ella accedió sin saber que ese viaje pudo haber acabado en una tragedia. En un momento del trayecto el sospechoso le cogió del volante y lo giró haciendo que se salieran de la vía y colisionaran. Él se marchó corriendo dejándola allí, pero fue detenido horas después.

Este episodio que se investiga en el marco de la violencia machista ocurrió el pasado viernes a las 23.45 horas. La Guardia Civil recibió una llamada en la que se avisaba que un turismo había tenido un accidente, acercándose hasta la calle Rigoberta Menchú del municipio zaragozano, donde efectivamente vieron un turismo que había tenido un accidente. El coche estaba junto al guardarraíl izquierdo, presentando daños en la carrocería. En el interior estaba una mujer, que ocupaba el puesto del conductor, quien les dijo que había sido su expareja.

La mujer les contó que J. P. P., de origen español y de 35 años, le había pedido llevarle a casa y que «pese a que no tiene muy buena relación con él», aceptó. «Por el camino iba muy nervioso, me estaba reprochando cosas y cuando llegamos a Villanueva al intentar parar el coche ante la situación, él cogió el volante, dio un giro brusco y ya me salí de la vía», relató al tiempo que añadió que «tras ello se marchó del lugar».

Un hecho que hizo que esta mujer rompiera su silencio al admitir que está «harta» de que después de dos años tras la ruptura «me acose». Ante ello, los agentes le dijeron que podía interponer una denuncia en la que contar todo lo que había sufrido hasta ahora. Lo hizo y explicó en la denuncia que no había hablado antes «por miedo» y porque es el padre de su hijo.

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Aseveró que el tiempo que fueron pareja hubo muchas discusiones y que cuando se rompió ella intentó quedar con él de la mejor manera posible y acordó de forma verbal que cuando la denunciante estuviera trabajando él podría hacerse cargo del niño. «Al principio no pasó nada, pero pronto empezó a acosarme y a agobiarme, presentándose cada dos por tres en el casa o en el lugar del trabajo», afirmó, mientras destacó que ella le dijo que le diera su espacio, si bien «no lo acepta, volviéndose muy agresivo verbalmente». «Me ha amenazado con irse con el niño y ya no volverle a ver, o con escacharme a mí o a mi familia la cabeza si me echo novio», añadió. También explicó que alguna ocasión le ha agredido físicamente, llegándola a coger del cuello.

El arrestado pasó ayer ante la magistrada del Juzgado de Instrucción número 12 que, en funciones de guardia, acordó la libertad provisional, tal y como pidió su abogada defensora, Carmen Sánchez Herrero. Eso sí, acordó una orden de alejamiento y prohibición de comunicación.