Lodos delincuentes detenidos por la Guardia Civil en la operación Lanzeroski contaban con las herramientas más sofisticadas utilizadas en el mundo del hampa: Lanzas térmicas, inhibidores de frecuencia, clonadores de mandos de puertas, llaves maestras, pinchos para perforar las ruedas de coches en caso de persecución.

Los investigadores les imputan cinco robos y sospechan que estarían involucrados en otros cinco, donde habrían conseguido un botín de unos 70.000 euros en los últimos dos años.