El Gobierno quiere rebajar la factura del millón seiscientos mil hogares que tienen calefacción central. Hay comunidades que directamente han decidido no encenderla este invierno porque no pueden asumir el coste. El problema es que no pueden abaratar la factura porque se les considera grandes consumidores, lo que les impide acogerse a la tarifa regulada. Otra de las medidas aprobadas es una mayor protección para los hogares vulnerables. Se ampliará la población protegida con el bono social y térmico, aunque el Gobierno tampoco ha aclarado quién más se beneficiará. Para concienciar sobre el ahorro energético, la factura recogerá información del consumo medio en el distrito en el que se vive y se darán consejos para ahorrar. Además, habrá ayudas fiscales para facilitar la transición energética de los hogares. Son algunas de las 73 medidas nuevas que se unen a las que se han ido aprobando y que según el Gobierno han permitido que los precios de la electricidad estén un 33% más baratos que sin medidas.