El fiscal Tomás Herranz ha acabado su informe entre lágrimas, pidiendo perdón a los acusados y ovacionado por el propio Cursach, el resto de procesados y sus abogados defensores.

Este informe más que justificar ante la sala la retirada de acusación, tiene otro objetivo. Reconocer ante los acusados que han sufrido la injusticia. El cambio de la Fiscalía obedece a un intento mínimo de reparar el daño", ha sentenciado.