Diario de Mallorca ha sido testigo de la actuación de la Policía Local de Palma en el interior de una vivienda, durante el desalojo de un edificio okupado en el que residían 28 personas, entre ellos 2 niños.

El inmueble cuenta con un expediente de desalojo por amenazas de derrumbe, sin embargo, los moradores y el portavoz de la asociación Stop Desahuicios, Joan Segura, afirman que no hay gritas ni humedades y que se trata "de una trampa para desalojar familias".