Microsoft ha descontinuado la consola Xbox One, lanzada en 2013, con el objetivo de potenciar la fabricación de su hardware de nueva generación, Xbox Series X/S, después de dejar de productir los modelos Xbox One X y la edición digital de One S en julio de 2020.

La directora senior de Marketing de producto de Xbox, Cindy Walker, ha confirmado a The Verge el cambio de estrategia con el que Microsoft busca centrar sus esfuerzos en la producción de los nuevos modelos.

"Para centrarnos en la producción de Xbox Series X/S, detuvimos la producción de todas las consolas Xbox One a finales de 2020", ha indicado Walker.

En julio de 2020 la compañía anunció su decisión de poner fin a la fabricación de Xbox One X y la edición digital de Xbox One S, de cara a la llegada de su hardware de próxima generación. Entonces solo se mantuvo Xbox One S.

Esta información sucede al reciente anuncio de Sony. La compañía tecnológica japonesa ha confirmado, según Bloomberg, que afrontará la escasez de componentes dedicados a la fabricación de su consola más nueva, PlayStation 5, incrementando la producción de PlayStation 4 durante 2022.