Si hay algo que no queremos ver ni en pintura es una prenda de ropa con tóxicos. Vamos a estar con ella puesta más de 10 horas diarias y todo lo que te acompaña durante tanto tiempo es recomendable que sea saludable a la vez que cómodo.

La organización Greenpeace ha descubierto una compañía que está vendiendo productos supuestamente con una cantidad de tóxicos preocupantes. Hablamos de la empresa china Shein.

Lo que hizo Greenpeace fue comprar "42 artículos de las páginas web de Shein en Austria, Alemania, Italia, España y Suiza y 5 artículos de una tienda pop-up en Múnich, Alemania". A partir de ahí, los enviaron "a un laboratorio independiente para analizar su composición química".

"Los análisis muestran que SHEIN incumple la normativa medioambiental de la UE sobre sustancias químicas, poniendo así en peligro la salud de consumidores y del personal de los proveedores que fabrican los productos. Shein está por tanto incumpliendo el Reglamento REACH", así mismo lo asegura el informe de 59 páginas publicado por Greenpeace en el que detallan todas las conclusiones de su investigación.

Además, la propia organización informa de que algunos de los productos de Shein serían especialmente preocupantes para el consumo. "De los 47 productos SHEIN analizados hemos encontrado que siete de ellos contenían sustancias químicas peligrosas que superan los límites reglamentarios de la UE (Unión Europea), y cinco de estos productos superan los límites en un 100 % o más, es decir sobrepasan los límites tope máximos. Además un total de 15 de los productos contienen sustancias químicas peligrosas en niveles preocupantes".

Greenpeace insta a las empresas a "producir menos ropa y diseñar productos de mejor calidad, duradero, reparable y reutilizable". Desde luego que se debe encontrar siempre el término medio, el entendimiento, entre la actividad empresarial (el deseo de producir beneficios económicos) y el deseo del consumidor de percibir el mejor servicio posible.