Los productos tradicionales y más conocidos por nuestros padres, madres, abuelos y abuelas son los que aún se usan hoy en día en todas las casas.

Suelen ser muy versátiles y se pueden utilizar sobre cualquier mancha o suciedad, además, son los que nunca fallan y que son efectivos cada vez que se utilizan.

Hace días te hablábamos del jabón Beltrán, un poderoso antimanchas que además dejará los suelos impolutos, del bicarbonato de sodio que sirve para todo en lo que a limpieza se refiere o del Volvone que se hizo un hueco en todas las casas en su momento.

Hay algo similar que se vende en Mercadona y que es ideal si tienes camisetas, sábanas o camisas que han perdido su color blanco original y que las deja como nuevas.

Lo más común es que, a medida que empleamos más las prendas y la ropa de cama, se vayan desgastando y aunque su vida útil parezca perderse, en realidad, se puede mejorar significativamente con este producto.

Menos de dos euros

Es una sustancia química sin color ni olor, que puede disolverse en agua y que se ha convertido en uno de los productos imprescindibles para eliminar las manchas más difíciles de la ropa. Puede utilizarse directamente en la lavadora, pero no lo confundas con el bicarbonato de sodio porque no daña los tejidos.

Es un polvo blanco muy económico y eficaz, se vende en paquetes de 750 gramos y su precio no llega a los dos euros. Teniendo en cuenta que en cada uso se empleará una cantidad mínima, durará muchísimo tiempo. Hablamos del percarbonato de sodio.

Para usarlo lo único que tienes que hacer es añadir una cucharada sopera en el cajetín de la lavadora. Pon el detergente, el suavizante y el percarbonato, escoge el programa que tengas que emplear, siempre de agua templada de entre 30 y 40 grados centígrados, y listo.

Puedes usarlo en varios tejidos porque es un quitamanchas muy potente y eficaz en la ropa blanca. Verás como los resultados son una maravilla, la ropa pierde sus manchas y, de paso, se blanquea, obteniendo un resultado espectacular.