La Policía Nacional detuvo ayer en Palma a un joven español de 19 años por encañonar a los clientes de un bar con una pistola, que resultó ser de aire comprimido. Está acusado de un delito de amenazas graves con arma de fuego.

Los hechos ocurrieron el martes poco antes de las once de la mañana en la terraza de un bar, cuando el acusado le pidió un cigarrillo a otro, que se lo negó. Ahí comenzó una discusión durante la que el joven sacó una pistola y comenzó a encañonar a los allí presentes, a la vez que les decía: “No me miréis tanto”.

En ese momento, los clientes se refugiaron dentro del bar y el sospechoso, al ver que llamaban a la Policía, huyó a la carrera. Cuando los agentes llegaron al lugar de los hechos, recabaron información de los testigos y dieron varias batidas por la zona.

Los policías lograron localizar al joven en una calle cercana y tomaron las medidas de precaución para interceptarlo y detenerlo. Una vez arrestado comprobaron que llevaba en una mochila una pistola de aire comprimido.

El sospechoso quedó detenido por un presunto delito de amenazas graves con arma de fuego simulada.