La Policía Nacional ha detenido a diez hombres, uno de ellos en dos ocasiones diferentes, por diferentes robos a turistas cometidos desde finales de abril hasta el 1 de mayo en la zona de Playa de Palma de madrugada. Los sospechosos son de origen argelino y saharaui, tienen entre 19 y 39 años, y están acusados de delitos de hurto. Los arrestos son fruto de los dispositivos previos a la operación verano que viene desarrollando la Brigada Provincial de Seguridad Ciudadana de Palma y en concreto el Grupo Operativo de Respuesta con unidades de paisano y de uniforme.
Tres de los robos se cometieron en la arena, mientras los turistas se encontraban descansando o bañándose en el mar. En una de las ocasiones, los agentes observaron a un hombre vigilando a dos personas que se encontraban tumbadas en la arena durmiendo, acercándose posteriormente a la pareja, introduciendo sus manos en los bolsillos de las dos personas, sin que se diesen cuenta, ya que estaban dormidos. El ladrón consiguió sustraer diferentes objetos, para posteriormente comenzar a caminar y darse a la fuga, siendo interceptado por los agentes. Entre sus pertenencias encontraron dos teléfonos móviles, los cuales fueron reconocidos por las víctimas.
Esa misma noche, los agentes observaron a un grupo de personas en el muro que separa la arena de la zona del paseo en actitud vigilante hacia una pareja de turistas que habían depositado sus pertenencias en la arena para bañarse. Posteriormente tres de ellos se dirigieron a ellas, mientras las víctimas estaban en el agua, dos se situaron cerca haciendo de muro, mientras que el tercero sustraía diversos objetos, estando el cuarto vigilando en la zona del paseo, emprendiendo la huida una vez que tenían los teléfonos móviles. Ante la presencia policial tiraron los efectos a la arena, procediendo los agentes a interceptar a los cuatro jóvenes, informando a las víctimas, las cuales reconocieron como suyos los teléfonos móviles, desbloqueando los mismos con la contraseña correspondiente.
En la noche del 1 de mayo, los agentes observaron a tres varones en actitud sospechosa, sentándose mientras vigilaban la zona de hamacas de la playa, momento en el que uno de ellos se introdujo en la arena y se ocultó tras las hamacas, regresando junto con sus compañeros, los cuales estaban en actitud vigilante, portando una riñonera con una camiseta colgada que antes no llevaba.
Los policías interceptaron a los varones, encontrando entre sus pertenencias una cartera a nombre de un turista, un teléfono móvil y unas gafas, siendo los efectos reconocidos por sus legítimos propietarios, que se encontraban en las inmediaciones.
Hurtos en el paseo de la playa
Otro robo se produjo también de madrugada momento en el que los agentes visualizaron a un joven, siendo conocido por los mismos por diversas intervenciones policiales anteriores, por lo que procedieron a realizar una vigilancia del mismo. El varón se sentó entre dos extranjeros, controlándolos hasta el momento en que se distrajeron y se acercó sigilosamente por la parte trasera, procediendo a abrir una riñonera, sustrayendo la cartera y el teléfono móvil, sin que la víctima se percatara, procediendo a darle el alto, encontrando entre sus pertenencias una cartera con documentación, un teléfono móvil y dinero en efectivo, reconociendo el turista los efectos como suyos en ese momento.
Otra de las detenciones se produjo en el paseo de la primera línea de playa y de noche, los agentes fueron comisionados, ya que había un policía fuera de servicio que tenía retenido a un varón, a quien había alcanzado tras una persecución, ya que previamente había robado el teléfono móvil a un turista que gritaba pidiendo que lo pararan.
Una vez en el lugar, los agentes se entrevistaron con el policía fuera de servicio contando lo anteriormente narrado y con la víctima la cual manifestó que se encontraba caminando por la calle, cuando notó un golpe en el pantalón, donde tenía su teléfono móvil, momento en el que se dio la vuelta y vio al detenido correr, comprobando que su teléfono móvil ya no estaba en
su bolsillo.
