La Audiencia Provincial ha rebajado de seis a tres años de prisión la condena al acusado de la muerte del cineasta holandés Wouter Van Luijn en el poblado de Son Banya en 2018. El tribunal, que estima parcialmente el recurso del abogado Gaspar Oliver, exculpa al procesado del delito de robo con violencia, al considerar que no está acreditado que la agresión por la que murió la víctima se produjera durante un atraco. El fallo mantiene la pena impuesta por el delito de homicidio imprudente por los golpes propinados al turista, que murió tanto por las lesiones sufridas en el ataque como por el aneurisma que padecía y la intoxicación etílica.

La sentencia de la sección primera de la Audiencia relata que el cineasta, que estaba de vacaciones en Mallorca, acudió a Son Banya para comprar droga en la madrugada del 13 de julio de 2018 en un taxi junto a otras dos personas. El acusado y dos o tres personas más que no han sido identificadas, lo abordaron y le dieron varios bofetones y puñetazos en la cabeza, la cara y el cuello. Van Luijn cayó al suelo y quedó inconsciente.

El juzgado de lo penal que juzgó el caso concluyó que se trataba de un atraco, pero la Audiencia considera ahora que no ha quedado acreditada la causa por la que se produjo esta agresión. Aunque cuando ocurrieron los hechos el cineasta llevaba dinero que no fue hallado, la sala sentencia que no está claro cómo desapareció ni quién se apoderó de él.

La víctima falleció apenas dos horas después del ataque debido a los golpes, la existencia de un aneurisma previo, su estado de intoxicación etílica y la situación de tensión que se vivió en el poblado de Son Banya.

Wouter van Luijn, el cineasta que sufrió la agresión mortal. DM

El acusado por el crimen fue declarado inicialmente autor de un delito de homicidio imprudente y otro de robo con violencia, por el que fue condenado a seis años y medio de prisión en total y a indemnizar a los padres de la víctima -que le acusaban de asesinato- con 150.000 euros por los daños morales causados.

La Audiencia Provincial, tras revisar el caso, ha absuelto al procesado del delito de robo con violencia, como solicitaba su abogado defensor. En cambio, mantiene la condena de tres años de prisión por el homicidio imprudente, si bien considera que fue cometido en concurso con otro de maltrato de obra.

Las magistradas rechazan el recurso presentado por la familia de Van Luijn, que ejerció la acusación particular en el procedimiento y reclamó la nulidad del procedimiento y la repetición del juicio.

En el banquillo de los acusados se sentó otro joven por haber participado en el atraco y de haber encubierto al otro procesado. La jueza de lo penal lo absolvió al entender que no había pruebas de su implicación en los hechos.