Un aparatoso incendio ha destruido este viernes el edificio anexo, utilizado antaño como spa, de un hotel de Peguera. El personal, que se encontraba trabajando de cara a la inminente apertura al público del establecimiento prevista para la próxima semana, ha tenido que ser desalojado. Por fortuna no ha habido que lamentar daños personales y los materiales han quedado muy localizados en el inmueble contiguo.

Detalle de los destrozos causados por el fuego en al antiguo spa. L.MARINA

El fuego se ha iniciado sobre las doce y media del mediodía de este viernes en el hotel s’Olivera, situado en el número 16 de la calle Eucaliptus de Peguera, en el término municipal de Calvià. «Un compañero se asomó y vio salir humo de lo que era el spa, pero cuando yo miré había muchas llamas», ha explicado un trabajador.

Desde el hotel ha avisado a los servicios de emergencia y un dispositivo especial se ha movilizado de inmediato. Bombers de Mallorca han desplazado varias dotaciones, incluida una autoescalera, desde el parque de Santa Ponça. También acudieron agentes de la Guardia Civil y de la Policía Local de Calvià. Estos últimos se han centrado en cerrar el tráfico mientras los servicios de extinción trataban de sofocar las llamas.

Como medida de precaución, todos los trabajadores que en ese momento se encontraban dentro del establecimiento hotelero han sido desalojados. El hotel se preparaba dando los últimos retoques para su próxima apertura, prevista inicialmente para la próxima semana. Aunque no tenían claro aún si el siniestro obligaría a posponerlo unos días más.

Fachada ennegrecida

Las labores de extinción se han prolongado durante casi tres horas, desde las 12.30 hasta las 15.11. Los esfuerzos de los Bombers se centraron en tratar de evitar que las llamas se propagaran hasta el núcleo del hotel, propiamente dicho. El trabajo ha dado sus frutos y el fuego ha quedado contenido en lo que antaño había sido un spa y ahora se había reconvertido en una suerte de trastero, sin una utilidad definida. La fachada completamente ennegrecida reflejaba la gran dimensión que había alcanzado el fuego.

«Confiamos en que la apertura se pueda hacer como está previsto, pero todavía hay que examinarlo», han explicado desde la dirección del hotel siniestrado de Peguera. En este sentido se han congratulado sobre todo de que no hubiera que lamentar daños personales y de que el edificio afectado por el fuego no tuviera ahora una utilidad definida.