El fiscal solicitó ayer una pena de siete años y medio al acusado de causar la muerte del cineasta holandés Wouter van Luijn en Son Banya durante un supuesto atraco. No obstante el representante del ministerio público propuso la pena alternativa de cuatro años y medio, al sustituir el delito de robo con violencia por lesiones, si el primero no quedaba lo suficientemente acreditado.

Por su parte, la acusación particular, ejercida por la familia del director fallecido, pidió para el procesado una pena de 30 años por un presunto delito de asesinato. También solicitó una pena de seis años de prisión para otro procesado, al entender que habría encubierto a varias personas.

Durante la última sesión del juicio, celebrado ayer, en el Juzgado de lo Penal número cinco de Palma, prestó declaración la médica forense que realizó la autopsia al director de cine. Durante su comparecencia, la facultativa explicó que no apreció lesiones significativas en el cerebro de la víctima. No obstante presentaba una gran hemorragia en la base del cráneo compatible con una patología vascular. «De no haber tenido un aneurisma, no se habría producido la muerte», concluyó la galena.

Por su parte, el médico de Son Espases que atendió a la víctima aludió que esta presentaba una «extensa hemorragia subaracnoidea», en la base del cráneo después realizarle las pruebas radiológicas. De hecho apuntó que la imagen «sugiere que su origen era un aneurisma».

Los hechos que se enjuiciaron el lunes y ayer en Vía Alemania ocurrieron en la madrugada del 13 de julio de 2018 en Son Banya. El cineasta holandés Wouter Van Luijn, de 34 años, se encontraba a de vacaciones en Mallorca. Al parecer había consumido esa noche mucho alcohol y, en un momento dado, decidió acudir al poblado para comprar droga. Para ello la víctima tomó un taxi y se desplazó hasta allí con dos acompañantes.

Golpes en la cabeza

Nada más llegar al asentamiento, Wouter van Luijn se apeó del vehículo y buscó un lugar apartado para orinar. Al parecer algunos de los moradores en el poblado le sorprendieron miccionando. Según el fiscal, el encausado habría aprovechado esta circunstancia para atracarle, ya que en esos momentos portaba unos 800 euros en billetes.

De acuerdo con el escrito de la Fiscalía, el principal acusado le habría propinado una serie de puñetazos y bofetadas a la víctima hasta que esta se desplomó. En ese instante la habría sustraído el dinero que portaba en la cartera. Al ver que no reaccionaba y temer por su vida, este individuo le llevó en su coche a Son Espases, donde falleció.