La búsqueda de la menor Malén Ortiz desaparecida el 2 de diciembre de 2013, se ha extendido este martes a una parte de una finca de sa Porrassa, en Magaluf, pegada a una casa abandonada. Una veintena de efectivos de la Guardia Civil ha proseguido este martes las labores de rastreo para tratar de determinar el paradero de la adolescente iniciada el pasado lunes. Efectivos del instituto armado provistos de palas y cedazos para cribar el terreno han complementado las tareas iniciadas por una excavadora.

Las labores de búsqueda de la Guardia Civil de Malén Ortiz en sa Porrassa, nueve años y medio después de su desaparición, se han iniciado, por segunda jornada consecutiva, a primera hora de la mañana para inspeccionar esta finca. Estos terrenos se encuentran situados junto a una yeguada y están ubicados a un kilómetro escaso del lugar donde fue vista por última vez la menor antes de que su rastro se perdiera por completo.

En la primera jornada parte del operativo se empleó en realizar prospecciones del terreno mediante la utilización de un martillo percutor, en un área con escombros y montículos de tierra y rocas. Después de perforar la tierra, se peinaban los puntos indicados con perros entrenados.

Aunque desde la Guardia Civil no se quieren dar detalles sobre las actuaciones para no perjudicar a la investigación, la actitud de los agentes sugería que en la primera jornada no se produjeron hallazgos significativos.

Durante la jornada de este martes , los esfuerzos se han concentrado en una parte más apartada de dicha finca. En concreto en la parte situada junto a una casa abandonada, situado a escasos metros de la carretera.

En este punto, los trabajos con una excavadora se han interrumpido mientras agentes de la Guardia Civil cavaban de forma manual cribaban algunos restos en un cedazo antes de introducirlos en una bolsa, para portar las pruebas. Los guías caninos de la Unidad Cinológica de la Guardia Civil han conducido a los perros, que han olfateado esta zona para tratar de detectar restos humanos. Durante esta inspección ocular se han tomado numerosas fotografías y se ha grabado en vídeo. Por su parte, efectivos del Grupo de Rescate de Montaña (GREIM) del Instituto Armado han examinado con detenimiento algunas partes con la vegetación más frondosa.

Desde el Instituto Armado han insistido en que la búsqueda de Malén nunca se ha paralizado. Las fuentes consultadas por Europa Press aseguran que en los últimos años se han realizado más gestiones que no han trascendido a la opinión pública. En este sentido, en los últimos años se han conocido pocas novedades en relación a la desaparición de Malén Ortiz.

Malén Zoe Ortiz desapareció el 2 de diciembre de 2013, cuando tenía 15 años de edad. La menor fue vista en la rotonda de los piratas de Magaluf, cuando iba a comer a la casa de su novio en Son Ferrer, tras salir del instituto de Santa Ponça.

Fue grabada por la cámara de seguridad de una gasolinera de la zona, tras bajar de un autobús, llevando su patinete verde. Vestía una camisa de cuadros y una chaqueta vaquera. Sin embargo, nunca llegó a su destino.

La búsqueda se hizo por tierra, mar y aire. Al principio se barajó la hipótesis de una desaparición voluntaria, pero posteriormente fue cobrando fuerza la de una desaparición forzosa.

Desde entonces, familiares y amigos de la joven han organizado concentraciones periódicas para que su recuerdo no caiga en el olvido.