La Policía Nacional está investigando si una mujer que denunció haber sufrido una agresión sexual en su domicilio de Palma en la madrugada del pasado sábado pudo sufrir algún tipo de sumisión química. La víctima manifestó que tras tomar unas copas en un bar junto a un hombre al que acababa de conocer perdió la conciencia y no recordaba nada hasta que se encontró en la casa con el individuo, manteniendo relaciones sexuales sin su consentimiento. El presunto agresor sexual fue arrestado ese mismo día e ingresó en prisión.

Según informan fuentes de la Policía Nacional, los hechos ocurrieron durante la madrugada del pasado sábado. La mujer, de 35 años, había salido a tomar copas con unas amigas y en un bar de la zona de Blanquerna, en Palma, conoció a un hombre. Ambos se apartaron del grupo y estuvieron hablando y bebiendo juntos.

Según la denuncia, la mujer empezó a perder la percepción del entorno y la situación, hasta que finalmente el hombre la acompañó a su domicilio. La víctima manifestó que no recordaba nada de lo que había ocurrido posteriormente, hasta que se encontró en su vivienda manteniendo relaciones sexuales con el hombre, sin que ella hubiera dado su consentimiento.

Sobre las siete de la mañana la mujer se inventó una excusa para que el hombre se marchara. Le dijo que estaba a punto de recibir la visita de unos amigos, por lo que pudo hacer que se fuera.

De inmediato la mujer se marchó a un hospital donde comunicó lo que le había ocurrido. Los servicios médicos activaron el protocolo previsto para estos casos y alertaron a la Policía Nacional.

Agentes de la Unidad de Familia y Mujer (Ufam) de la Policía Nacional abrieron una investigación que permitió localizar en cuestión de horas al presunto autor de la agresión sexual. Se trataba de un ciudadano hondureño de 37 años, que fue arrestado el mismo sábado.

El hombre fue trasladado a las dependencias policiales y posteriormente conducido al juzgado de guardia. Tras tomarle declaración, el titular del juzgado ordenó su ingreso en prisión provisional.

Mientras tanto, los investigadores de la Policía prosiguen las pesquisas para determinar si la mujer pudo ser víctima de algún tipo de sumisión química. En el hospital se le realizaron diversas analíticas para comprobar si había ingerido alguna sustancia. Por ahora, las sospechas se fundamentan en la declaración de la víctima, que manifestó que tras tomar unas copas con el individuo había experimentado una sensación que no había vivido nunca antes, con la pérdida de la noción de la realidad y no recordaba nada.