El miércoles por la tarde, los bomberos recibieron el aviso de que una chabola estaba ardiendo en la calle Tous, en La Soledat. Los vecinos explicaron que allí vive desde hace un tiempo un indigente. Los equipos de emergencias comprobaron que había una gran cantidad de enseres y basura acumulados y no tenían claro si el morador estaba atrapado entre las llamas. Tras unos minutos de incertidumbre, comprobaron que había podido escapar a tiempo del incendio. Los bomberos tuvieron que emplearse durante horas para extinguir las llamas y aun así se vieron obligados a regresar al lugar varias veces porque quedaban puntos calientes.
Un coche destrozado abandonado desde hace un mes frente a la playa
Un voluminoso vehículo todoterreno con graves destrozos ha acabado exasperando y agotando la paciencia de los vecinos de Ciutat Jardí. El coche, un Suzuki Vitara gris de gran tamaño, permanece estacionado en el mismo lugar desde hace más de un mes. Se encuentra en la calle Golfo de Cádiz, a escasos metros de distancia de la playa, y es una circunstancia muy excepcional que alguien deje este automóvil en plena calle en esta situación tan deteriorada. Muchos vecinos de la zona ya han clamado para que este tipo de turismos, como este con las placas de matrícula destrozada en la parte delantera, sean retirados por la grúa municipal.
Una ‘pista de carreras’ de coches frente al estadio de Son Moix
El camí dels Reis, a la altura de Son Moix, se ha convertido de madrugada en una suerte de ‘pista de carreras’. Algunos conductores dan un brusco acelerón en el tramo recto entre una rotonda y otra. Con lo que no cuentan es que la Policía Local, equipada con un radar, suele estar al acecho. Así, sobre las cuatro y cuarto de la madrugada del pasado 17 de febrero, un coche fue sorprendido circulando a 111 kilómetros por hora en un tramo limitado a 40. El presunto delito contra la seguridad vial se comunicará al titular del coche y al juez.
Final feliz a la desaparición de un niño en sa Pobla
Un niño de seis años, que estaba con unos familiares, desapareció el lunes por la tarde en el centro de sa Pobla. Los allegados, muy angustiados, acudieron a la Policía Local, que realizó de inmediato un llamamiento a través de las redes sociales junto a una fotografía del menor para intentar dar con él. El efecto de esta iniciativa policial fue prácticamente inmediato. Buena prueba de ello es que la angustia por su desaparición apenas duró media hora, hasta que el pequeño apareció sano y salvo.
La Policía Local de Inca evita la okupación de un piso
Un grupo de personas intentó entrar en una vivienda de Inca hace unos días para instalarse como okupas en este inmueble de la capital del Raiguer. Llevaban consigo varias herramientas para abrir la puerta por la fuerza e incluso bombines para cambiar la cerradura. Esta meticulosa planificación de la okupación de esta vivienda no tardó en desvanecerse por completo. La Policía Local fue alertada por varios testigos y los agentes acudieron enseguida al lugar para impedir que se hicieran con el inmueble. Al verse sorprendidos, a estos okupas no les quedó más remedio que batirse en retirada en busca de una mejor ocasión.
