Un equipo de rescatistas de la Guardia Civil salvaron el pasado sábado a un montañero que se quedó enriscado en una pared del Puig de Massanella en condiciones muy peligrosas, con la zona cubierta de nieve y hielo muy resbaladizo. El hombre fue finalmente evacuado en helicóptero.

Según informa la Guardia Civil, el rescate se activó el sábado por la mañana, cuando se recibió un aviso de que una persona se había quedado atrapada en una de las paredes del Massanella, junto a un precipicio de treinta metros de altura y donde las rocas estaban cubiertas de nieve y hielo, muy resbaladizo.

Al lugar se desplazó un equipo del Grupo de Rescate de Montaña (GREIM) de la Guardia Civil en helicóptero, que localizaron al hombre en una repisa sobre el acantilado, en una posición muy precaria. La aeronave se aproximó con mucho cuidado para evitar que el rebufo le desequilibrara. Los rescatistas llegaron junto a él y comprobaron que no tenía lesiónes, aunque sí mucho frío, por lo que le equiparon con prendas de sus propios uniformes y lo izaron con una grúa hasta el helicóptero.

El hombre no precisó asistencia médica y pudo volver a su casa.

La Guardia Civil recuerda que las excursiones a la montaña deben realizarse con el equipamiento adecuado, especialmente en zonas cubiertas de nieve, para lo que se requieren crampones y piolet, que pueden evitar riesgos de accidentes.