Los socorristas de Cala Bona rescataron ayer por la mañana el cadáver de un buceador que ha aparecido flotando en el mar, frente al Port Vell. La Policía Local de Son Servera y la Guardia Civil abrieron una investigación para aclarar qué le ha ocurrido, aunque en principio todo apuntaba a un ahogamiento accidental.
El cadáver fue avistado ayer por la mañana, sobre las once menos cuarto, flotando en el mar de la bahía de Son Servera, a poca distancia del Port Vell de Cala Bona. Los socorristas de la zona acudieron rápidamente y le rescataron, aunque el hombre ya había fallecido.
Los socorristas trasladaron el cuerpo al Port Vell de Cala Bona. Al lugar se desplazaron también unidades de la Policía Local y la Guardia Civil, que iniciaron una investigación para determinar lo ocurrido.
Los investigadores comprobaron que el fallecido iba vestido con un traje de neopreno y no llevaba ningún documento que permitiera identificarle.
Según esta inspección inicial, se trataba de un varón de entre cuarenta y sesenta años. En principio no se apreció en el cuerpo ninguna señal de violencia, por lo que todo apuntaba a que había sufrido un ahogamiento accidental. De este primer examen se desprendía que la muerte habría ocurrido poco tiempo antes, durante esa misma mañana o en la madrugada previa.
El cadáver fue trasladado al Instituto de Medicina Legal, donde está previsto que se le lleve a cabo la autopsia.
