El tren turístico accidentado el pasado miércoles en la localidad de Cala Ferrera, en el municipio de Felanitx, tenía toda la documentación en regla y había pasado su última revisión hace un mes y medio, según informa el gerente de la empresa Carrilets, que tiene la concesión del servicio. Mientras tanto, la Policía Local de Felanitx continúa con las investigación para determinar las causas del siniestro y por ahora no ha detectado problemas mecánicos, por lo que todo apunta a un fallo humano. El conductor habría tomado la curva demasiado cerrada y a excesiva velocidad para superar la cuesta de la calle, de manera que las ruedas del último vagón golpearon contra el bordillo de la acera, lo que provocó el vuelco. Once turistas, entre los que había cuatro menores, resultaron heridos, la mayoría de ellos de carácter leve.
La empresa Carrilets había ganado recientemente el concurso municipal para gestionar el tren turístico, que empezó a funcionar el pasado 5 de agosto. Según explicó el gerente de esta empresa ayer, «el vehículo se encontraba en perfectas condiciones de funcionamiento, había pasado su última revisión hace un mes y medio y tenía todos los informes favorables».
El gerente de Carrilets apuntó a que todos los indicios con los que contaba apuntaban a que el accidente se produjo por un fallo humano. «En cualquier caso lo más importante», añadió, « es que no hubo heridos de gravedad y todos los turistas afectados se están recuperando».
Mientras tanto, la Policía Local de Felanitx, que se encarga de confeccionar el atestado sobre el accidente, prosigue con sus gestiones. Ayer varios agentes se desplazaron al lugar donde se encuentra el tren siniestrado y realizaron una detenida inspección ocular y un reportaje fotográfico.
Fuentes municipales indican que por ahora no se han detectado deficiencias técnicas en el tren, por lo que se mantiene la hipótesis que se señaló desde el primer momento: el conductor habría tomado la curva demasiado cerrada en el momento en el que aceleró para encarar una calle cuesta arriba, de manera que las ruedas del último vagón golpearon contra el bordillo de la acera, lo que provocó el vuelco.
Las mismas fuentes indicaron que no tenían constancia de ninguna denuncia anterior sobre irregularidades en el servicio o deficiencias en el vehículo.
La empresa Carrilets está especializada en estas atracciones. En la actualidad gestiona trenes turísticos en Euzkadi, Cataluña y Balears. En las islas es la responsable de estos vehículos en Port d’Alcúdia, Can Picafort y Sant Lluís (Menorca), además del de Cales de Mallorca.
Once heridos: la mayoría ha recibido el alta
En el accidente ocurrido el miércoles en Cala Ferrera resultaron heridas once personas, entre ellas cuatro menores. De ellas, nueve fueron trasladadas a dos centros hospitalarios y tres solo requirieron asistencia in situ. Siete recibieron el alta el jueves, por lo que solo dos permanecían ingresadas en estado reservado. Todos los afectados eran turistas de nacionalidad francesa, irlandesa, británica y alemana.
