Prisión para el detenido por el tiroteo del miércoles por la noche en la barriada de Son Oliva. El integrante del clan de los Pelúos ha sido presentado esta mañana ante el juez de guardia, acusado de los delitos de tentativa de homicidio y tenencia ilícita de armas. A pesar de que ha negado los hechos, la fiscalía ha pedido su ingreso en prisión, que ha sido aceptado por el magistrado de guardia.

El implicado en el tiroteo entre dos clanes gitanos que están enfrentados desde hace años es un hombre de 56 años de edad. Fue localizado en el piso okupa en el que vivía, ubicado en la calle Isaac Peral. Desde este domicilio, según pudieron comprobar varios vecinos, se disparó nueve veces contra un vehículo todoterreno, en el que viajaban los cinco integrantes del clan de los Sheriff, que se habían desplazado a Son Oliva a recoger a una de sus familiares, menor de edad, que horas antes había tenido un enfrentamiento con dos mujeres de la familia rival.

La Policía realizó un registro en el domicilio del detenido, pero no localizó ninguna arma. Se sospecha que disparó con una pistola de pequeño calibre y por fortuna todas las balas impactaron contra la carrocería del coche de la marca Porsche y no alcanzó las lunas del vehículo, ya que si hubiera sido así con toda seguridad hubiera alcanzado a alguno de los ocupantes del todoterreno.

Después del suceso la Policía se desplegó por toda la barriada de Son Oliva, con el objetivo de descubrir lo que había pasado y, sobre todo, para detener al autor, o autores, del tiroteo. Los investigadores pronto descubrieron que los disparos se habían realizado desde el domicilio de la calle Isaac Peral y se descartó que los ocupantes del coche hubieran contestado con disparos al tiroteo que habían sufrido.

Lo que sí ha quedado claro a la Policía es que el detonante de la disputa fue un incidente previo que sufrió una niña menor de edad, perteneciente al clan de los Sheriff, que fue agredida por dos mujeres que pertenecen a la familia rival.

La Policía sospecha que fueron varias las personas que estuvieron disparando desde el piso, si bien solo se ha podido demostrar la implicación de una de ellas. Por ello, los investigadores continúan con las gestiones y no se descarta que se puedan producir en breve nuevos arrestos. Una de las prioridades de la investigación es localizar la pistola utilizada y comprobar si los integrantes de esta familia disponen de otras armas.