Uno de los dos detenidos en Alicante en la tarde-noche del martes por la supuesta violación a una niña de 14 años ha quedado en libertad 24 horas tras detectar los investigadores incongruencias que siembran dudas sobre el relato de los hechos que provocaron su arresto.

El otro continúa en los calabozos de la Comisaría provincial de Alicante, desde donde será trasladado probablemente el viernes hasta los juzgados de Benalúa para ser puesto a disposición judicial por un delito de agresión sexual a menor de 16 años.

Se trata de un tipo penal que busca proteger la integridad sexual de los menores de esa edad y que está penado con hasta doce años de cárcel, en función de las circunstancias que concurran, aún cuando en la relación no hubiera mediado violencia o intimidación. 

Los dos hombres, de 22 años, fueron detenidos por agentes del Cuerpo Nacional de Policía en la estación de Adif de Alicante cuando se disponían a coger un tren en dirección al sur de la provincia, donde al parecer residen.

 El arresto se producía apenas unas horas después de que, a raíz de una llamada del Hospital General Doctor Balmis a la Comisaría provincial, se activara el protocolo por la supuesta violación de una niña de 14 años.  

Según los primeros datos facilitados por la menor, sobre los que la Policía inició sus pesquisas, la niña habría sido abordada por estos dos hombres al filo de las cuatro de la tarde del martes en un supermercado de la zona del Pla. Allí, tras intimidarla con un cuchillo, la habría violado uno de ellos en los aseos del establecimiento. A continuación, y también a punta de navaja, la habrían conducido hasta la zona del castillo de Santa Bárbara donde el mismo chico la habría vuelto a agredir mientras el otro la intimidaba. 

La Policía comprobó que los dos jóvenes tienen sendos expedientes administrativos por infracción de la Ley de Extranjería y uno de ellos, el que no mantuvo relación alguna con la niña, antecedentes policiales por un delito contra el patrimonio. Pero ninguno de ellos nada relacionado con agresiones sexuales.

En una cuidadosa investigación al tratarse de una menor, los agentes han trabajado con todas las hipótesis abiertas, incluso con la posibilidad de que hubiera algún conocimiento previo entre los dos hombres y la menor, al menos a través de redes, sin que este extremo haya llegado a concretarse.

No obstante, ha sido la comprobación del relato de los hechos la que ha llevado a descartar que se hubiera producido la agresión en el supermercado y que la del castillo fuera como en principio había relatado la niña.