La Guardia Civil ha detenido a un hombre por supuestamente robar 15.000 euros en una residencia que los Misioneros de África, Padres Blancos tienen en Benicàssim, según confirmaron desde la entidad religiosa. La investigación se inició tras recibir una denuncia en el puesto de la Benemérita de esta localidad, en la que se indicaba que el pasado 24 de diciembre, justo el día de Nochebuena, habían accedido al interior del centro tras forzar una ventana.

Una vez en el interior, el ladrón registró y causó daños en todas las habitaciones, un total de 16, consiguieron localizar, finalmente, la caja fuerte y sustraer 15.000 euros en efectivo.

Este dinero procedía de donaciones particulares que tenían como destino países del continente africano. Tras conocer los hechos, los agentes iniciaron una investigación para el esclarecimiento del hecho y, tras numerosas pesquisas así como otras gestiones más técnicas, pudieron demostrar que un varón de 54 años había participado en el ilícito penal.

Por todo ello, se procedió su detención como presunto autor de un delito de robo con fuerza en las cosas. Tanto las diligencias como el detenido pasaron a disposición del juzgado de guardia.

Hospital de salud mental

El robo de las donaciones se produce en un momento en el que esta orden está a punto de marcharse de la provincia, ya que la Conselleria de Sanitat y esta comunidad religiosa están ultimando la compraventa de la residencia para ubicar allí el nuevo hospital infanto-juvenil de salud mental de la provincia, como ya avanzó este periódico el pasado mes de diciembre. 

Las instalaciones, que se encuentran en la urbanización Las Palmas, junto a una conocida residencia de mayores de la localidad, seguirán el mismo camino que la residencia de los Padres Blancos tenían en Sevilla, que cerró en el 2020 por falta de vocaciones. Este instituto misionero nacido en Argel y que realiza su misión sobre todo en África solo se quedará con tres sedes en España; en la capital de España, Roquetas de Mar en Almería y Barañáin en Navarra.

Esta comunidad religiosa lleva 17 años esta localidad castellonense, donde llegaron a haber 11 religiosos de esta comunidad frente a los tres sacerdotes que quedan en estos momentos.