"Cuando me he despertado, el fuego y el humo llegaban ya por encima del colchón". Con estas palabras Mary Joy explicaba el sobresalto con el que se ha despertado la madrugada de este viernes al enterarse de que se le quemaba la casa. Un cortocircuito en un pequeño calefactor y ventilador, que tenían en el dormitorio, consideran el responsable del devastador incendio. Ocho personas han resultado intoxicadas por inhalación de humo al incendiarse el dormitorio de un edificio de Pere Garau, en Palma. Cuatro residentes en el inmueble afectado han tenido que ser hospitalizados.

El incendio se ha iniciado sobre las tres de la madrugada de este viernes en un segundo piso de un inmueble situado en el número 14 de la calle Pere Llobera de Palma. En el domicilio afectado, situado en la segunda planta, residía una familia. Mary Joy, su esposo Ian y sus hijos Alexian, de seis años, y Víctor de uno. Por fortuna no ha habido que lamentar daños personales, pero los daños materiales ha sido cuantiosos. Una dotación completa de Bombers de Palma con una autoescalera se han desplazado hasta el lugar. Las labores de extinción se han prolongado durante una hora y media. Todos los vecinos han tenido que ser desalojados durante este tiempo.

Dormitorio de la vivienda, donde se ha iniciado el fuego. L.MARINA

"Subí al piso de arriba a avisar del incendio. Cuando bajé a mi casa, se había caído el techo del dormitorio", explica Mary Joy. El fuego se ha iniciado en esta habitación de la segunda planta, pero el humo se ha extendido rápidamente por el resto del edificio. Hasta el lugar también han acudido efectivos de la Policía Local de Palma, de la Policía Nacional y las asistencias sanitarias del Ib-salut. Como medida de precaución, el edificio ha sido desalojado mientras proseguían las tareas de extinción.

Los facultativos han atendido a ocho personas por intoxicación debido a la inhalación de humo. De estas cuatro han sido atendidas 'in situ' y otras tantas, del inmueble afectado, han sido trasladadas a Son Espases. Sobre las cuatro y media de la madrugada, el incendio ha sido sofocado y la mayoría de los vecinos desalojados han podido regresar a sus viviendas.

Durante la mañana de este viernes, Bombers de Palma han inspeccionado minuciosamente la vivienda siniestrada para ver si se podía entrar. La 'zona cero', el dormitorio, era la habitación más afectada. El techo se había derrumbado y había un elevado riesgo de que se pudiera repetir.