Una mujer murió y un hombre sufrió lesiones muy graves ayer al ser atropellados por un todoterreno frente a la catedral de Palma. Las víctimas, al parecer turistas británicos de unos 40 años, estaban esperando en la mediana para cruzar por un paso de peatones cuando el vehículo se salió de la calzada, se subió a la acera y se las llevó por delante. Ambos salieron despedidos por el brutal impacto y sufrieron heridas de extrema gravedad. Ella murió en el lugar del siniestro pese a los esfuerzos de los sanitarios por reanimarla; él fue trasladado en estado crítico a Son Espases. El siniestro provocó un amplio despliegue de los servicios de emergencias y la zona sufrió importantes retenciones. La Policía Local de Palma ha puesto en marcha una investigación para aclarar por qué el todoterreno atropelló a los peatones.

El accidente ocurrió al filo de las seis de la tarde, según explicaron fuentes policiales y sanitarias, en la avenida Adolfo Suárez. Varias llamadas alertaron de que se había producido un grave atropello. Al lugar acudieron de inmediato patrullas de la Policía Local de Palma y cinco vehículos sanitarios del Ib-Salut. 

Los efectivos de emergencias comprobaron que dos personas yacían inconscientes sobre la calzada. Una de las víctimas, una mujer, estaba en parada cardiorrespiratoria y los sanitarios intentaron reanimarla durante tres cuartos de hora antes de certificar su fallecimiento. La otra víctima era un hombre con las constantes vitales muy débiles y que presentaba traumatismos graves por todo el cuerpo. Tuvo que ser intubado y evacuado en una UVI móvil a Son Espases, donde ingresó en estado muy grave.

La Policía Local de Palma se desplegó por la zona para regular la circulación y fue necesario cortar varios carriles en ambos sentidos de la circulación. Los agentes comprobaron que el vehículo que arrolló a las víctimas era un todoterreno Opel Frontera, que circulaba en dirección al Paseo Marítimo. Tras el atropello recorrió casi 200 metros para acabar en los carriles destinados al sentido contrario, explicaron las mismas fuentes.

Los agentes elaboraron un atestado para determinar con precisión las causas del grave atropello. Los policías examinaron el vehículo y se entrevistaron con la conductora, una mujer de unos 30 años que se mostró muy afectada por lo ocurrido. Fue sometida a un test de alcohol y drogas cuyo resultado no trascendió. Los investigadores tomaron declaración también a varios testigos del siniestro para recabar toda la información posible.

La muerte de la mujer fue comunicada al juzgado de instrucción numero 6 de Palma, que se encontraba en funciones de guardia, y el cadáver fue trasladado al Instituto de Medicina Legal. A la espera de la identificación oficial, fuentes policiales señalaron que se trata de una pareja británica.