Una fuga en la tubería de una estufa de leña habría causado la muerte de un matrimonio británico el pasado sábado en su domicilio de Selva. La autopsia practicada ayer a los cadáveres del hombre de Michael Alistair R., de 62 años, y a su esposa Sheron G., de 56, confirmó que fallecieron por una intoxicación por la inhalación de monóxido de carbono. El informe forense llegó ayer a esta conclusión sobre la muerte de las dos víctimas después de examinar minuciosamente los dos cuerpos.
Los investigadores de la Policía Judicial de la Guardia Civil, que se adentraron en el domicilio de Selva, apuntaron como principal hipótesis desde un principio que la causa de la muerte de este matrimonio era una intoxicación por inhalar humo o una mala combustión de una estufa.
Un análisis más detallado de la escena donde aparecieron los dos cadáveres perfiló esta hipótesis. La tubería que conectaba a una estufa de leña con el exterior no encajaba bien, estaba desprendida. Esta circunstancia provocaba que el humo que debía evacuar se escapara del conducto e inundara el inmueble.
Otro elemento que también alarmó a los investigadores y que respaldaría esta teoría de la intoxicación por humo fue la presencia de un generador en el interior de la vivienda. Su uso en espacios cerrados está terminantemente prohibido, ya que su motor desprende también monóxido de carbono.
El trágico hallazgo del matrimonio británico fallecido se produjo sobre las cuatro de la tarde del lunes en su residencia situada junto a la carretera que comunica Inca con Mancor de la Vall, en el término municipal de Selva. Un amigo del hijo de la pareja se desplazó hasta el lugar después de que el vástago le llamara desde el Reino Unido al no tener noticias de sus progenitores.
Una escena desoladora
El allegado del hijo del matrimonio abrió la puerta de la vivienda con llave y se topó con la desoladora escena: los cadáveres de los padres de su amigo. Al parecer notó el aire enrarecido y optó por abrir las ventanas antes de llamar a los servicios de emergencia.
Efectivos de la Policía Local de Selva, la Guardia Civil, asistencias sanitarias del Ib-salut y Bombers de Mallorca acudieron al inmueble. Las asistencias sanitarias del Ib-salut no pudieron hacer nada por sus vidas.
El médico forense del Juzgado de Inca se desplazó también a la vivienda y dató en dos días antes la fecha del fallecimiento.
