La Policía Nacional ha detenido a dos presuntos miembros más de una banda juvenil desarticulada el pasado mes de agosto, y a la que se le atribuyen al menos once robos en establecimientos de Can Pastilla, es Molinar y es Coll den Rabassa, en Palma. Se unen así a los otros tres detenidos que fueron arrestados inicialmente.

Las investigaciones del Grupo de Robos de la Policía condujeron el pasado mes de agosto a la detención de tres chicos, presuntos integrantes de una banda que había perpetrado numerosos robos de madrugada en establecimientos de las zonas de Can Pastilla, es Molinar y es Coll den Rabassa. A la banda se le atribuía también el robo de al menos tres coches, que utilizaban para desplazarse a los lugares donde delinquían y para huir con rapidez. En esta intervención policial fueron detenidos tres jóvenes. Otros dos de los miembros de la banda no pudieron ser localizados, aunque estaban plenamente identificados.

Finalmente, a lo largo de las últimas semanas han sido arrestados los dos chicos que faltaban. El último de ellos fue interceptado el pasado lunes por una patrulla de Seguridad Ciudadana, que identificó a un joven sospechoso en las Avenidas y comprobó que tenía pendiente una requisitoria por el Grupo de Robos.

Con estas dos últimas detenciones la Policía considera totalmente desarticulada la banda, a la que se le atribuyen al menos once robos con fuerza en establecimientos y tres sustracciones de vehículos.

Los robos se cometían habitualmente entre las cuatro y las cinco de la madrugada. Los ladrones rompían las puertas de cristal arrojando piedras o adoquines, o incluso propinando patadas. Una vez en su interior sustraían los objetos de valor que encontraban y se escapaban, por lo general en coches también robados.