Un hombre fue condenado ayer a seis años de prisión por violar a una niña de 13 años que estaba ebria en Sóller. El procesado, de 32 años, reconoció durante el juicio celebrado en la Audiencia Provincial de Palma que forzó a la menor a mantener relaciones sexuales tras pasar varias horas consumiendo alcohol con ella en un bar de la localidad. Deberá indemnizarla con 15.000 euros. La sentencia, como acordaron la Fiscalía, la acusación particular y la defensa aprecia dos atenuantes porque el acusado también tenía sus facultades mermadas por el consumo de alcohol y ha abonado parte de la compensación económica.

Los hechos ocurrieron en febrero de 2020. El acusado conocía a la víctima desde pequeña y era plenamente consciente de su edad, ya que vivían en el mismo pueblo y él era cliente habitual del negocio del padre de la menor.

Una noche, el hombre y la niña estuvieron en un bar de Sóller con varias amigas de ella. Hacia las tres y media de la madrugada, el acusado pidió a la menor que la acompañara a su casa con la excusa de recoger una cosa. La menor accedió y cuando llegaron al domicilio el acusado le dio otra bebida alcohólica.

De pronto, el hombre sentó a la niña en su cama, la sujetó con fuerza y la obligó a practicarle una felación, a pesar de que ella, que estaba mareada por el consumo de alcohol, le imploraba que parara. Sin embargo, el procesado no paró y acabó quitándole los pantalones, tras lo que la inmovilizó y la penetró.

El padre de la menor denunció los hechos dos semanas después y el acusado fue detenido. Estuvo algo más de tres meses en prisión provisional, hasta que quedó en libertad bajo fianza. La niña, por su parte, fue derivada al servicio terapéutico del Institut Mallorquí d’Afers Socials (IMAS) y precisó asistencia psicológica.

La Fiscalía imputó al hombre un delito de agresión sexual a menor de 16 años, por el que reclamó inicialmente una condena de 13 años y medio de prisión y una indemnización para la niña. 

Dos atenuantes

Un pacto entre el ministerio público, la defensa y el abogado de la menor, que ejercía la acusación particular, ha rebajado la condena. Las partes han acordado apreciar dos atenuantes, una porque el acusado tenía sus facultades mermadas por el alcohol y otra porque había consignado ya 3.000 de los 15.000 euros con los que debe indemnizar a la perjudicada por los daños morales

Según anunció el tribunal, no podrá acceder al tercer grado hasta que haya cumplido la mitad de la condena y deberá cumplir una orden de alejamiento de la niña de 12 años