La Fiscalía solicita una condena de seis años de prisión para un entrenador de un club de rugby de Mallorca por abusos sexuales a una de sus jugadores, una menor que tenía 12 años. La vista previa celebrada ayer en la Audiencia Provincial de Palma terminó sin acuerdo y el tribunal señaló el juicio para finales de marzo de 2023.

La acusación sostiene que el procesado, irlandés de 30 años, se aprovechó de la «superioridad que le confería su condición de entrenador» y de la diferencia de edad para someter a la víctima a tocamientos con diversos pretextos, como darle abrazos o masajes en las piernas. Además, entre 2016 y 2019 mantuvo conversaciones de WhatsApp con la niña en las que llegó a pedirle que le enviara fotos de ella desnuda y le propuso citarse para mantener relaciones sexuales y participar en orgías.

A consecuencia de estos hechos, según la Fiscalía, la víctima ha sufrido secuelas emocionales. El ministerio público imputa al sospechoso un delito continuado de abusos sexuales a menor de 16 años con prevalimiento de relación de superioridad, por el que reclama seis años de prisión y una indemnización de 6.000 euros para la perjudicada.