Un búlgaro de 38 años ha sido detenido por la Guardia Civil como presunto responsable del accidente ocurrido el jueves por la noche en la carretera de es Murterar, cerca de sa Pobla, que se saldó con una mujer muerta y otras nueve personas heridas. El hombre se negó a realizar la prueba de alcoholemia ante la Guardia Civil, por lo que se le imputó inicialmente un delito de desobediencia, pero posteriormente dio positivo en el análisis que se le realizó en el hospital de Son Espases, donde permanece ingresado bajo custodia policial.

Según informan fuentes de los distintos organismos de emergencia, el accidente ocurrió a las nueve de la noche del jueves a la altura del kilómetro 4,6 de la carretera de es Murterar (Ma3433), que une sa Pobla y Alcúdia. Un turismo BMW 735 colisionó frontalmente contra un Citroen C3, que a su vez golpeó lateralmente contra un Ford Fiesta. A consecuencia del choque falleció Olga R.M., de 51 años, que viajaba como pasajera en el Citroen. Sus tres acompañantes, dos jóvenes de 20 y 21 años y otra mujer de 51 años, sufrieron lesiones graves. Los dos ocupantes del BMW, dos hombres de 38 y 40 años, resultaron también heridos de gravedad, mientras que los cuatro ocupantes del Ford Fiesta, entre los que había una niña de seis años, sufrieron heridas leves.

El siniestro provocó una gran movilización de los organismos de emergencia. El 061 envió a seis ambulancias y un vehículo de intervención rápida y activó su protocolo de múltiples víctimas, de manera que los heridos fueron distribuidos entre distintos hospitales de la isla para no colapsar los servicios de urgencia.

Los Bombers de Mallorca se desplazaron también desde su base de Alcúdia y liberaron a uno de los heridos, que había quedado atrapado en el interior de un vehículo.

La Guardia Civil cortó el tráfico en la vía para evitar otros siniestros e inicio las gestiones para determinar las causas. Los agentes intentaron realizar el test de alcoholemia al conductor del BMW, que aunque estaba herido en un brazo, estaba en condiciones de hacerla, pero se negó, por lo que fue imputado por un delito de desobediencia. Posteriormente, en el hospital, se le practicó un análisis de sangre que dio positivo en alcohol. El hombre quedó ingresado en el centro en calidad de detenido por los delitos de homicidio y lesiones por imprudencia, así como la desobediencia. 

Según las primeras investigaciones de la Guardia Civil, el BMW habría provocado el siniestro al invadir el carril izquierdo. Además los dos hombres que viajaban en el coche no llevaban puesto el cinturón de seguridad.