Un cliente ebrio de un bar de Palma reaccionó de forma violenta cuando el dueño se negó a servirle otra copa. El individuo sacó una pistola detonadora y encañonó con ella al propietario y a los otros clientes.
La Policía Nacional detuvo a este hombre de 69 años por un delito de amenazas con un arma de fogueo y por un delito contra la seguridad del tráfico, al dar positivo en la prueba de alcoholemia.
Los hechos ocurrieron sobre las siete de la tarde del pasado jueves en un bar del barrio palmesano de sa Indioteria. Un cliente, en notorio estado de embriaguez, se encontraba molestando a los allí presentes. En vista de lo cual, el dueño se negó a servirle más copas.
Ante la medida adoptada por el propietario, el cliente salió airado del bar y se dirigió a su vehículo. Este se encontraba aparcado delante de su establecimiento.
A continuación, el individuo se asomó a la ventanilla, sacó un arma de fuego y encañonó con ella a todos los allí presentes. Tanto al dueño como al resto de clientes. Al propietario le amenazó de muerte.
Al recibir una llamada, una patrulla de la Policía Nacional acudió al bar, pero los agentes no localizaron en esta ocasión al presunto autor de las amenazas con la pistola detonadora. Al cabo de unos minutos, el sujeto regresó al establecimiento.
Los agentes volvieron de inmediato y redujeron al sospechoso por temor a que portara el arma de fuego consigo. No fue así. El individuo finalmente instó a los policías a que le acompañaran para entregarles la pistola de fogueo. Esta se encontraba en una estantería abandonada en la vía pública. A continuación, los agentes le detuvieron por un presunto delito de amenazas con pistola detonadora. También fue detenido por un delito contra la seguridad del tráfico al conducir y dar positivo en la prueba de alcoholemia.
