Antonio G.L., el líder de la secta sexual desarticulada por la Policía Nacional en el Mas de la Chaparra de Vistabella (Castellón) la pasada semana, permanece en la cárcel de Castelló de la carretera Alcora. El principal investigado en la presunta trama de agresiones y abusos sexuales --tanto a menores, como a adultos-- trata de seres humanos con fines de dominación doméstica y sexual y exhibición de pornografía se encuentra en la enfermería del centro penitenciario, puesto que tiene movilidad reducida y va en silla de ruedas.
Según ha podido saber EL PERIÓDICO MEDITERRÁNEO, diario que pertenece al mismo grupo que este medio, de fuentes solventes, el conocido como tío Toni entre los adeptos de la comuna no está pasando desapercibido en sus primeros días entre rejas. Desde que el Juzgado de Instrucción número 6 de Castelló decretara su ingreso en prisión provisional sin fianza el pasado jueves por la tarde, el principal investigado en la trama de la secta de Vistabella se muestra "altivo" e "irrespetuoso" con el personal de la prisión, quien lo califica de "maleducado". Además, se da la circunstancia de que la enfermería del centro penitenciario no dispone de ascensor, por lo que si Antonio G.L. tiene que salir del módulo por algún motivo, son los funcionarios los que tienen que cargar a pulso con él, según ha podido conocer este periódico.
No quiso declarar
El principal investigado se acogió el pasado jueves a su derecho a no declarar tras ser trasladado a la Ciudad de la Justicia de Castelló desde la comisaría de la Policía Nacional. Tampoco declararon el resto de los arrestados, quienes decidieron no responder a las preguntas de las partes al estar decretado el secreto de las actuaciones.
El pasado viernes, la magistrada de Instrucción 6 levantó el secreto de sumario y cabe la posibilidad de que las defensas pidan la declaración de sus defendidos una vez conocidas la investigación policial realizada hasta la fecha y las acusaciones que pesan sobre los investigados. Cabe recordar que los agentes detuvieron a nueve personas, de las cuales tres ingresaron en prisión preventiva.
El registro del Mas de la Chaparra, una finca de grandes dimensiones a unos ocho kilómetros de Vistabella, se desarrolló a primera hora del pasado martes en el marco de un gran despliegue policial.
La Policía Nacional liberó a dos menores de edad, de ocho y 13 años, y arrestó a nueve adultos --entre ellos, al tío Toni y su mujer--.
Como suele suceder en este tipo de casos, fueron las denuncias de varias personas que ya habían conseguido escapar de los tentáculos de la comuna quienes dieron la voz de alarma y se decidieron a denunciar en marzo del año 2021, propiciando así el inicio de la investigación y la actuación policial que desarticuló la secta.
Material informático
Como ya publicara este diario días atrás, los investigadores se incautaron en la finca de Vistabella de abundante material informático que está siendo ahora debidamente analizado por expertos para comprobar si existen grabaciones de los presuntos abusos y agresiones sexuales y esclarecer si los mismos pudieron difundirse a terceras personas o, incluso, comercializarse durante los años de actividad de la comuna.
Según la investigación, el líder se erigía maestro reiki con sus propias fórmulas y hacía creer a las víctimas que poseía un gran poder «sanador». Bajo este pretexto y la influencia que tenía sobre las mujeres de la comunidad, mantenía supuestas relaciones sexuales con ellas a espaldas de sus parejas varones. Al parecer, este tipo de relaciones íntimas se producían bajo una especie de trance al que debía llegar el cabecilla.
La investigación continúa ahora su curso y se prevé larga debido al gran número de víctimas que podrían haber estado bajo el yugo de la secta durante sus, al parecer, dos décadas de actividad.
