Un hombre de 38 años fue detenido ayer por dar una brutal paliza a su exjefe, de 68 años, en un restaurante en Son Serra de Marina, en Santa Margalida. El agresor esperó a que el dueño del negocio cerrara el establecimiento de madrugada para abalanzarse sobre él por sorpresa y descargar una lluvia de patadas que le causaron lesiones muy graves en la cabeza. Fue trasladado de urgencia al hospital de Inca, donde permanecía ingresado. El sospechoso, que trabajó como camarero en el restaurante, se dio a la fuga, pero fue identificado y localizado unas horas después gracias a las gestiones de la Policía Local de Santa Margalida y la Guardia Civil. En su coche se encontraron manchas de sangre que están siendo analizadas. Los investigadores tratan de aclarar si, como apuntaba el primer aviso, el acusado se llevó dinero u objetos de valor del local y cuál fue el móvil de la agresión.

Los hechos, según explicaron fuentes policiales, ocurrieron poco después de la medianoche del domingo en el restaurante Can Miraet, situado en la carretera que une Artà y Alcúdia. Una llamada alertó a las fuerzas de seguridad de que el dueño del negocio había sufrido un atraco y estaba herido.

La primera patrulla de la Policía Local de Santa Margalida que llegó al lugar descubrió grandes manchas de sangre a las puertas del establecimiento. Cuando entraron, encontraron a la víctima sentada en una mesa y cubierta de sangre. Presentaba varias brechas en la cabeza y, aunque consciente, estaba muy aturdida y tenía grandes dificultades para hablar. Los agentes solicitaron asistencia médica y poco después acudieron al restaurante una ambulancia, una UVI móvil, efectivos del PAC de Muro y una patrulla de la Guardia Civil.

El hombre pudo explicar que estaba cerrando la puerta del restaurante para irse a su casa cuando un hombre lo abordó y, tras tirarlo al suelo, le propinó numerosas patadas en la cabeza. Según su relato, consiguió escapar y refugiarse en el interior del local. 

La propia víctima precisó que solo había un agresor y apuntó a un antiguo empleado suyo como autor de la agresión. Una UVI móvil lo trasladó al hospital de Inca. Fuentes del Ib-Salut explicaron que el hombre permanecía ayer por la tarde en observación en el área de Urgencias. Los médicos lo sometieron a varias pruebas para conocer el alcance exacto de los traumatismos sufridos. 

La Policía Local y la Guardia Civil llevaron a cabo diversas gestiones para identificar, localizar y detener al autor de la agresión. Los investigadores consiguieron averiguar el nombre del sospechoso y acudieron a su domicilio, en un edificio de apartamentos de Son Serra de Marina. Allí encontraron su coche con manchas de sangre tanto en el pedal del acelerador como en una de las puertas. Ante una de las viviendas hallaron varias pisadas que desprendían un fuerte olor a lejía.

Investigan el móvil

El caso quedó en manos de la Guardia Civil, que a lo largo de la mañana de ayer arrestó al acusado en esa vivienda. El sospechoso, A.S.S., de 38 años, fue trasladado al cuartel del instituto armado para ser interrogado sobre su implicación en la brutal agresión. Los investigadores están a la espera también de poder tomar declaración a la víctima para aclarar lo ocurrido. Los agentes encargados del caso intentan determinar el móvil del ataque y confirmar si, como apuntaban las primeras informaciones, el acusado se llevó dinero u objetos de valor del establecimiento. Está previsto que el detenido sea puesto a disposición judicial en las próximas horas.