Una mujer fue condenada ayer a dos años y tres meses de prisión por llevar heroína a la cárcel de Palma escondida en la vagina. La acusada reconoció en la Audiencia Provincial que el 27 de febrero de 2020 regresó tras un permiso al centro penitenciario, donde cumplía condena por dos casos de narcotráfico, con un paquete oculto en los genitales.

En el acceso fue sometida a un cacheo y ella misma extrajo de su vagina un envoltorio en el que había una cabeza de cepillo de dientes, en cuyo interior guardaba algo más de tres gramos de heroína para venderla en prisión. La mujer se declaró autora de un delito contra la salud pública con la agravante de reincidencia tras pactar con la fiscal.