La Policía Nacional ha detectado un ascenso en el número de denuncias de delitos relacionadas con las redes sociales. En concreto, los casos de acoso sexual a menores, conocidos como "child grooming" se han disparado un 300% en Baleares en los últimos años, según explica el agente Roberto Machado, del Grupo de Delincuencia Económica y Delitos Tecnológicos.

En estos casos, los presuntos autores llevan a cabo una labor de captación en la que se hacen pasar por una persona similar a la víctima creando un perfil falso, en el que finge tener la misma edad o ser algo mayor que la víctima, con gustos similares a la misma, compartiendo sus preocupaciones, problemas o aficiones para de esta forma ganarse la confianza de los menores. En este punto empieza un intercambio de fotos o vídeos de índole sexual entre la víctima y los cyber-delincuentes, que en ninguno de los casos las imágenes que remiten pertenecen a ellos mismos sino que son imágenes de otros menores que han obtenido con anterioridad. Con las primeras fotos comprometidas en su poder, los delincuentes extorsionan a la víctima para que les envíen fotos e imágenes de mayor contenido sexual, con la amenaza de difundirlos.

Una tipología delictiva que los agentes también detectan son las situaciones de cyber-bulling en las que otros menores crean perfiles falsos para increpar o amenazar a compañeros de clase, en este aspecto es necesario informar nuevamente que los autores en la gran mayoría de casos son personas menores de edad y deben ser conscientes que los que cometen es un delito igual que el que se da en la vida real.

Por otra parte, las situaciones que se están dando dentro de las redes sociales no solamente afectan a menores de edad, sino también se están detectando una gran cantidad de estafas que son conocidas como “Romance-Scam”. Esta estafa consiste en que los delincuentes se crean perfiles de personas adultas con un atractivo considerable, un alto nivel de vida, un –status- que los coloca como referencia para otras personas, viven en países extranjeros donde existen conflictos bélicos o políticos y deben viajar a su país natal. A través de estas identidades comienzan a contactar con sus víctimas las cuales suelen cumplir un perfil similar, separadas, viven solas, buscan pareja,… Así es como comienzan a entablar una conversación que llevaban a cabo a través de redes sociales, haciéndoles creer que van a viajar hasta su localidad para verse con ellas, en ese viaje van a trasladar una serie de bienes que al pasar por la aduana deben efectuar un pago en concepto de aranceles, esa notificación de pago la dirigen a sus víctimas ya que ellos no pueden afrontarlas al estar en un país extranjero y es cuando las víctimas abonan las cantidades que suelen ascender a varios miles de euros, en este punto suelen ocurrir dos cosas, desaparecen sin dejar rastro o siguen aprovechándose de la víctima.

Nunca se debe remitir imágenes comprometidas, ya que pueden ser empleadas con otros fines, y más en el caso de los menores, que el hecho de solicitar imágenes de índole sexual ya supone un delito que puede ser atribuible a cualquier persona sin que el factor de la edad juegue a su favor. Así mismo también se debe recordar que los acosos a través de la red tiene el mismo castigo que los realizados de forma personal.

Igualmente se anima a todo usuario para que rehúse realizar cualquier pago o envío de dinero cuando se encuentren en situaciones como las comentadas en los casos de “Romance-Scam”.