De madrugada, dos jóvenes se colaron en una vivienda de Campos para sustraer las plantas de marihuana que había en la terraza. Al verse sorprendidos por un morador, se entabló un forcejeo y le golpearon. Uno de ellos zanjó la disputa sacando una placa falsa de policía. Los dos autores han sido condenados este jueves, en el juicio celebrado en el Juzgado de lo Penal número 7 de Palma, a cuatro años y medio de prisión por los delitos de robo con violencia, lesiones leves y usurpación de funciones públicas. No obstante, no han tenido que ingresar en la cárcel al quedar suspendidas las condenas.
Los hechos que se han enjuiciado este jueves ocurrieron sobre las tres y media de la madrugada del 10 de septiembre de 2020 en un domicilio de Campos. Tras escalar un muro de 2,20 metros, los dos ladrones alcanzaron la terraza de la vivienda donde pretendía sustraer las plantas de marihuana que allí había.
Tras percatarse la presencia de los intrusos, el morador les increpó. Los dos sujetos se abalanzaron sobre él y le golpearon. Los puñetazos le causaron traumatismos superficiales. Para tratar de zanjar la refriega, uno de los individuos sacó una placa falsa con la que se identificó como un supuesto funcionario de la Policía Judicial. Ante la posibilidad de encontrarse con un agente de la autoridad, el residente les dejó ir con las plantas de marihuana que le acababan de sustraer. Solo se dejaron en la vivienda un ejemplar de cannabis sativa.
Vuelta al lugar del delito
En vista de que el engaño le había dado resultado, el impostor regresó a las tres de la tarde a dicha vivienda en busca de la planta de marihuana que se habían dejado allí. Así, le enseñó de nuevo una placa y una tarjeta de seguridad privada para volverse a hacer pasar como miembro de la Policía Judicial. Al preguntarle por el ejemplar, al residente le dijo que lo había tirado a la basura.
Durante la vista celebrada este jueves, la defensa de los acusados y la fiscal han alcanzado un acuerdo de conformidad. Los procesados han aceptado una condena de un año y nueve meses cada uno por robo con violencia. Uno de ellos, además, se ha conformado con un año más de pena por un delito de usurpación por hacerse pasar por policía.
