Agentes de la Policía Nacional arrestaron el viernes por la tarde en el aeropuerto de Palma a un joven holandés de 18 años, presuntamente implicado en la brutal paliza que recibió un compatriota suyo el pasado miércoles en la primera línea de s’Arenal. La víctima, de 27 años, permanece en estado muy grave en el hospital de Son Espases. Los investigadores han identificado a otros ocho turistas holandeses responsables de la agresión, que regresaron precipitadamente a su país, por lo que se han iniciado gestiones para localizarlos y detenerlos allí.
Según informa la Policía, la agresión se produjo sobre las dos y veinte de la madrugada en primera línea de s’Arenal, a la altura del Balneario 1. Un grupo de jóvenes de origen neerlandés atacó sin motivo aparente a varios turistas de su misma nacionalidad.
En esta agresión resultaron heridos cinco jóvenes. Tres de ellos sufrieron lesiones leves, otro presentaba múltiples contusiones y quedó inconsciente, y el quinto, el joven de 27 años, sufrió heridas muy graves en la cabeza. La dotación de una ambulancia del 061 acudió al lugar y logró estabilizarle. El joven no respondía a los estímulos y tuvo que ser intubado. Fue trasladado en estado crítico al hospital de Son Espases, donde ayer permanecía ingresado en la Unidad de Cuidados Intensivos.
El Grupo de Homicidios de la Policía Nacional inició una investigación y descubrió que ese grupo ya había protagonizado otros incidentes similares esa madrugada en la misma zona. Otros turistas neerlandeses había sido atacado sin ningún motivo.
Los investigadores de Homicidios realizaron diversas gestiones y lograron identificar a los presuntos agresores, un grupo de nueve holandeses de entre 18 y 20 años que estaban de vacaciones en la Playa de Palma.
Los agentes averiguaron que ocho de ellos habían abandonado la isla precipitadamente tras la agresión, adelantando un día el regreso a su país, al parecer tras ser conscientes de la gravedad de las lesiones de la víctima, y ante las sospechas de que la Policía estaba ya tras su pista.
Solo pudo ser detenido uno de ellos, un chico de 18 años que fue interceptado el viernes por la tarde en el aeropuerto, cuando se disponía a tomar un avión rumbo a Holanda. El joven fue arrestado acusado de un delito de intento de homicidio.
La Policía Nacional ha iniciado gestiones para localizar y arrestar al resto de los implicados en su país a través de Sirene, el organismo policial internacional de la Unión Europea. La investigación sigue abierta para tratar de determinar los motivos que llevaron a los jóvenes a perpetrar estas agresiones aparentemente indiscriminadas.
