El Bufete Almodóvar & Jara, que lleva el caso de la Asociación de Afectados por Fármacos (ADAF) por los supuestos efectos secundarios del Nolotil, ha presentado este jueves ante el Juzgado Central de lo Contencioso-Administrativo número 4 de la Audiencia Nacional documentación sobre 97 casos clínicos para apoyar su demanda contra el Ministerio de Sanidad y la Agencia Española de Medicamentos y Productos Sanitarios (AEMPS). Así lo ha explicado la presidenta de esta asociación, Cristina García del Campo, a El Periódico de España, del grupo Prensa Ibérica.

El despacho cuenta con más de 400 autorizaciones de personas que se sienten representadas por ADAF. Nolotil (metamizol) se utiliza para el tratamiento del dolor agudo moderado o intenso post-operatorio o post-traumático, de tipo cólico o de origen tumoral. También, en los casos de fiebre alta que no responda a otras medidas u otros medicamentos para la fiebre. Es el primer medicamento consumido en unidades de todo el mercado farmacéutico y ocupa la segunda posición en valores dentro de los analgésicos antipiréticos.

Sistemas autonómicos

Desde Almodóvar & Jara piden también a los servicios autonómicos de farmacovigilancia que investiguen los casos notificados. La AEMPS, como gobierno central, "carga contra los servicios autonómicos de farmacovigilancia, pasando la patata caliente, y diciendo que deben ser ellos quienes investiguen los casos individuales, que ellos solo llevan la farmacovigilancia a nivel epidemiológico y que solo manejan una base de datos fármaco epidemiológica, que solo recoge datos de atención primaria".

El medicamento, indican, donde causas más problemas, es en el entorno hospitalario. Los abogados han recibido el plan de farmacovigilancia del producto por parte del laboratorio, pero señalan que deben analizarlos, porque son "muchas hojas de información estadística y muy técnica".

Acciones legales

ADAF ya había puesto en marcha acciones legales contra el Gobierno español a raíz de la negativa del Ministerio de Sanidad y de la Agencia Española de Medicamentos y Productos Sanitarios a investigar adecuadamente los cuantiosos casos notificados de daños por Nolotil (metamizol) y a tomar medidas para "proteger a la población de los riesgos de dicho medicamento".

Por otra parte, a comienzos de abril la Fiscalía de la Audiencia Nacional tramitó diligencias preprocesales sobre responsabilidad sanitaria, con motivo de la denuncia presentada por la Asociación El Defensor del Paciente, sobre la producción de efectos adversos para la salud por el consumo del medicamento. La presidenta de la asociación, Carmen Flores, señalaba a EL PERIÓDICO DE ESPAÑA que acudió a la Fiscalía tras tener conocimiento de la retirada del medicamento en varios países europeos y a través de una "situación familiar".

Agranulocitosis

Este periódico ya informó a mediados de febrero de que este órgano judicial venía analizando en dos ámbitos diferentes, el penal y el contencioso-administrativo, las responsabilidades que pudieran derivarse de los efectos adversos del Nolotil en algunas personas, como es la población flotante procedente de algunos países como Reino Unido, Estados Unidos o Suecia.

El fármaco puede causar una enfermedad conocida como agranulocitosis, que reduce los glóbulos blancos y aumenta el riesgo de infecciones que pueden ser mortales. Esta agrupación ha identificado unos 350 casos sospechosos de agranulocitosis entre 1996 y 2023. De los 350 casos sospechosos de daños, 170 son de británicos que viven o han estado de vacaciones en España.

Hasta ahora, la Fiscalía de Madrid centralizaba las denuncias penales que se interpusieron a finales del pasado mes de enero, también por la Asociación de Afectados por Fármacos, ante responsables del Ministerio Público en toda España.

No se retira

Tras conocer las diligencias preprocesales sobre responsabilidad sanitaria, con motivo de la denuncia presentada por la Asociación El Defensor del Paciente, la AEMPS se remitió a lo que ya ha dicho anteriormente, con motivo de la denuncia de ADAF.

En diciembre, determinó que la incidencia de agranulocitosis entre las personas que toman este fármaco es "muy baja", en el rango de 1 a 10 casos por millón de personas usuarias, "en una población de pacientes representativa de la práctica clínica real en España, incluidos pacientes que estaban en tratamientos durante varias semanas". Es decir, por el momento, el medicamento no se retira.