El patio de La Misericòrdia acogió ayer por la tarde-noche una nueva edición de la Nit del Vi, organizada por la asociación Petits Cellers, que en esta edición destinará parte de la recaudación a la organización Mater, que atiende a personas con diversidad funcional.

Desde las seis de la tarde, un total de 35 bodegas y productores de la isla dieron a catar más de 200 vinos de distintas variedades a los asistentes. El precio de la entrada fue de 15 euros, de los que cinco se descontaban de la compra de botellas y el resto se entregará a Mater.

El tiempo acompañó para disfrutar de esta noche dedicada al vino local en el patio de La Misericòrdia, donde hubo una buena muestra de la producción vinícola de la isla.

En esta iniciativa, Petits Cellers contó con la colaboración de Pimeco y del Consell de Mallorca.

Petits Cellers representa a 48 bodegas y pequeños productores de vino de las islas que producen bajo la Denominación de Origen de Pla i Llevant, la Denominación de Origen de Binissalem; la Indicación Geográfica Protegida Vi de la Terra de Mallorca, y la Indicación Geográfica Protegida Illes Balears. «Mallorca es una tierra rica en variedades autóctonas que en los últimos años se han revalorizado gracias al esfuerzo de muchas bodegas de la isla para elaborar vinos singulares, diferentes a los vinos comerciales del resto del mundo», destacan desde Petits Cellers.

Unos 35 productores y bodegas ofrecieron sus vinos. | MANU MIELNIEZUK

Por su parte, Mater prevé invertir los fondos conseguidos en ell taller de arteterapia y en la reforma del salón de actos que quieren convertir en teatro.

Días atrás, el presidente de Petits Cellers, Guillem Vicens, manifestó que el sector vinícola se había recuperado de la crisis provocada por la pandemia y que el consumo de vinos mallorquines crecía en la isla, al igual que las exportaciones al norte de Europa. «Nuestros vinos son cada vez más valorados tanto por los locales residentes como por los extranjeros residentes», señaló.