Julia Faustyna, una joven polaca de 21 años, se dio a conocer en todo el mundo el pasado 14 de febrero cuando afirmó ser Madeleine McCann, la niña desaparecida en Portugal en 2007. Desde entonces, ha ganado 1,1 millones de seguidores en Instagram con sus afirmaciones, pero también ha sido objeto de acoso y proposiciones sexuales. Faustyna decidió eliminar cualquier vestigio de su vida anónima y se derrumbó: "Soy naíf, pero no estúpida. ¡Dejadme en paz!"
Sin embargo, a pesar de haber eliminado contenido polémico de internet, los rastros digitales de Faustyna revelan que tenía perfiles en sitios web para adultos y que había incursionado en el mundo del modelaje. La joven sostiene que es Madeleine McCann debido a su parecido físico con la niña desaparecida y afirma que ha sido víctima de abuso sexual en su infancia, lo que la ha llevado a tener lagunas de memoria y la negativa de su familia a mostrarle su certificado de nacimiento. Asimismo, su entorno la ha rechazado debido a sus problemas psicológicos y su deseo de ser popular.
La chica solicitó someterse a una prueba de ADN con los padres de Maddie, Kate y Gerry McCann, los cuales, según ella misma afirmó, habrían accedido a ello. Sin embargo, hay escasa información sobre este asunto. Faustyna, quien ahora cuenta con una vidente como representante, ha atraído la atención en Internet, convirtiéndose en objeto de controversia.
Distintos perfiles en redes sociales y páginas web eróticas
Faustyna ha eliminado su cuenta personal de Facebook (@yavassa01) y su perfil de Twitter (@LovelyMiaVi_), donde solía publicar fotos explícitas bajo el seudónimo de Mia. Además, hacía públicas solicitudes a sus seguidores para que le enviaran mensajes privados, desde los cuales los redirigía a perfiles eróticos en sitios web para adultos.
Su manager, la médium Fia Johansson, que asegura tener "poderes psíquicos" y haber "ayudado a frustrar tramas terroristas", confirma que Faustyna participaba en estas actividades, incluso hasta días antes de declarar públicamente que era la pequeña Maddie. "Internet está llena de imágenes de Julia desnuda", admite. No obstante, niega que haya cerrado esas cuentas por afectar sus intereses.
Según su representante, la ingenuidad de Julia Faustyna demuestra que no planeó convertirse en el centro de atención mediática por afirmar ser Madeleine McCann. "Su ingenuidad prueba que ella no planeó todo esto, que surgió después de que sus padres se negarán a realizarse una prueba genética que corroborara que son sus progenitores biológicos", reiteró.
A pesar de haber eliminado todo el contenido polémico de internet, la joven polaca mantiene su perfil en una reconocida web de modelaje, en la que se presenta como aspirante a modelo de 20 años. En su perfil, indica que está interesada en aceptar pedidos pagados, participar en sesiones interesantes, desfiles, talleres, lookbooks y publicidad. También ha colgado decenas de imágenes de sus sesiones de fotos realizadas en 2019.
