"Esta situación de deterioro es insostenible y resulta crítico reconducirla a la mayor brevedad con medidas correctoras". Es el llamamiento que ha hecho este miércoles pre-navideño la Asociación Española de Pediatría (AEP) y sus 38 sociedades afiliadas, que representan a más de 12.000 pediatras en todo el país. Alertan, como vienen haciendo desde hace semanas, el colapso de la Atención Primaria, con sus compañeros de Madrid en huelga desde el 21 de noviembre, tiene un impacto directo en los hospitales. La AEP describe: urgencias desbordadas y con esperas prolongadas, demoras en la atención y derivaciones a centros hospitalarios "que no están justificadas y que complican aún más la situación".

Hace ya un mes, señala la sociedad científica, que instaron a las administraciones a resolver "con carácter urgente la situación de precariedad y déficit de recursos de la Pediatría en los diferentes ámbitos territoriales, especialmente, en la Atención Primaria, que ha llevado a la huelga a numerosos compañeros. Salvo contadas excepciones, nuestro llamamiento no ha tenido respuesta institucional y se anuncian nuevas movilizaciones en el primer nivel asistencial en nuevas comunidades autónomas, como Cataluña y en Valencia".

Los pediatras hospitalarios mostraron desde el inicio su apoyo a las reivindicaciones de los compañeros en huelga ante las "adversas condiciones laborales en las que están desempeñando su actividad", pero ahora, en plena Navidad, lanzan una alerta sobre el impacto que está teniendo la situación de la Atención Primaria en los hospitales: urgencias desbordadas, largas esperas, retrasos en la atención y derivaciones a centros hospitalarios "que no están justificadas y que complican aún más la situación".

Abandono institucional

Insiste la AEP que ya advirtieron que el "abandono institucional que sufre el primer nivel asistencial ya se estaba dejando sentir en una mayor presión hospitalaria, como se ha constatado en las últimas semanas con el notable incremento del volumen asistencial en las unidades de urgencias a causa de la circulación simultánea de varios patógenos respiratorios causantes de infecciones y su impacto en el retraso de la atención a los pacientes. Es necesario repetirlo: si dejamos que la Atención Primaria se colapse, asistiremos al colapso del resto del sistema", afirman.

Piden agendas de citación de pacientes cerradas en Atención Primaria con un mínimo de 10 minutos y, al menos, de 20 minutos en el caso de las revisiones del niño sano

La AEP repite sus reivindicaciones "para ofrecer una asistencia pediátrica con garantías" que pasan por agendas de citación de pacientes cerradas en Atención Primaria -exigen citas de un mínimo de 10 minutos de duración por paciente y, al menos, de 20 minutos en el caso de las revisiones del niño sano-; suplencia de todas las ausencias de pediatras por baja laboral, vacaciones e, incluso, reducciones de jornadas que, precisan, deben ser cubiertas por profesionales contratados como sustitutos. "No es aceptable que se repartan los cupos entre el resto de los pediatras de los centros", matizan.

Además, reclaman incentivar las plazas de pediatría de difícil cobertura con una mejor retribución económica, una mayor puntuación en los concursos de traslado y oposiciones y "una más fácil y rápida promoción en la carrera profesional" y horarios compatibles con la conciliación familiar. Concluyen: "Esta situación de deterioro es insostenible y resulta crítico reconducirla a la mayor brevedad con medidas correctoras", finalizan.